Lo anterior podría conducir a un aumento en el contenido de zinc de la semilla en un 50%.
Los nuevos conocimientos podrían algún día aplicarse a la producción de cultivos más nutritivos y así ayudar a combatir la desnutrición.
Se estima que más de dos mil millones de personas sufren de deficiencia de zinc, un problema que puede provocar un deterioro del sistema inmunológico, trastornos mentales y retraso en el crecimiento, señaló un comunicado de la Universidad de Copenhague.
Entre otras cosas, la desnutrición puede ser causada por tierras agrícolas infértiles, lo que afecta el contenido nutricional de cultivos básicos como el arroz, el trigo y el maíz.
Investigadores del Departamento de Ciencias Vegetales y Ambientales de la
Universidad de Copenhague han descubierto cómo mejorar la absorción de zinc
utilizando la planta de berro thale (Arabidopsis thaliana).
"Por primera vez, hemos demostrado que, al usar un interruptor molecular en la planta, podemos hacer que la planta absorba más zinc del que absorbería de otra manera, sin un aparente impacto negativo en la planta", afirmó la líder del estudio, Ana Assunção del Departamento de Ciencias Vegetales y Ambientales de la Universidad de Copenhague.
De acuerdo con lo indicado, el zinc beneficia a los humanos al ayudar a mantener una amplia gama de procesos químicos y proteínas que se ejecutan dentro de nuestros cuerpos. Si estos procesos dejan de funcionar correctamente, nos volvemos propensos a enfermarnos.
En el caso de las plantas, la ausencia de zinc afecta principalmente al crecimiento, que se ve afectado negativamente por la ausencia de zinc.
Detalle
Ana Assunção y sus colegas se han convertido en los primeros en identificar dos proteínas específicas del berro que actúan como sensores de zinc y determinan la capacidad de la planta para absorber y transportar zinc a través del tejido vegetal.
"En pocas palabras, al hacer un pequeño cambio en el sensor, hicimos creer a la planta que estaba en un estado permanente de deficiencia de zinc. Esto mantuvo la maquinaria de absorción de zinc de la planta en funcionamiento y resultó en un aumento del contenido de zinc en las semillas de hasta en un 50% en comparación con una planta normal", explicó Grmay Lilay, autora del estudio, Postdoctorado en Assunçãos Lab.
Los investigadores han demostrado que es posible aumentar la absorción de zinc en su planta experimental, pero el siguiente paso es reproducir los resultados en cultivos reales. Y los investigadores ya están en camino de hacerlo.
Están trabajando para recrear sus resultados en plantas de frijol, arroz y también tomate. Si tienen éxito, tendrán algunas oportunidades interesantes para desarrollar cultivos más nutritivos y biofortificados.
A largo plazo, los resultados de los investigadores podrían aplicarse mediante la edición de genes CRISPR o seleccionando variedades de cultivos naturales con una capacidad particularmente buena para absorber nutrientes como el zinc.