El mercado mundial de granos está jugado a que hoy el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), en el marco de un nuevo análisis sobre oferta y demanda, confirme los recortes sobre las existencias de soja y maíz en Estados Unidos. A su vez, los grandes productores de soja de Sudamérica continúan siendo afectados por un régimen de lluvias por debajo de lo normal, lo que puede provocar una caída en la producción de la oleaginosa.
Esa estimación de menores existencias mundiales, sumado a una demanda de China alta, pese a que compró mucha soja en Estados Unidos e hizo algunos contratos con soja futura en Brasil, justifica las subas que está teniendo la oleaginosa desde noviembre y diciembre, hasta llegar —este mes— a superar los US$ 500 por tonelada, llegando a máximos históricos y precios que no se veían desde hace siete años.
Los cultivos de soja lograron una buena implantación y continúan mostrando un buen desarrollo. Las recientes lluvias vienen como anillo al dedo, porque estaban sintiendo el estrés hídrico.
Situación. Desde el norte del país, el gerente comercial de Copagran Paysandú, Ing. Agr. Luis Simean, afirmó a El País que, “en general los cultivos están lindos”. En este departamento no recibieron tanta lluvia como en otras zonas, pero fueron ayudados por las precipitaciones de diciembre de 2020, que permitieron que se terminaran de plantar.
“Hubo una buena implantación, buen desarrollo y también un favorable estándar de plantas y por más que estén sintiendo el estrés hídrico, por lo general están buenos”. Los cultivos están en una etapa donde más consumo de agua precisan. El clima complicó un poco las siembras de soja de segunda, pero finalmente esa área se terminó sin problemas.
Precios. El gerente comercial de Copagran Paysandú, dijo tener la esperanza de que los actuales precios de la soja “se mantengan”. La tonelada de la oleaginosa en Chicago viene cotizando a US$ 500 e incluso por encima y el mercado mundial de granos está jugado al nuevo informe del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA).
Simean recordó que los actuales precios altos se sostienen por una demanda fuerte de China, que está con poca disponibilidad a nivel de sus stocks. Se suma la mejora de la relación comercial entre China y Estados Unidos, a partir del cambio de gobierno y el triunfo de Joe Biden. A su vez, la sequía que afecta a Uruguay también pega fuerte en Argentina y Brasil, fuertes productores de la oleaginosa a nivel del Mercosur y por lo tanto, se estima que habrá menos producción en el mundo. El foco está puesto en Sudamérica, donde el régimen de lluvias está por debajo del esperado. “Soy optimista en que esos precios se van a mantener. Ojalá no me equivoque”, afirmó Simean.
En la zafra pasada, la oleaginosa que es la responsable del 90% del área destinada a cultivos de verano, llegó a 917.000 hectáreas, con una producción estimada en 1.990.438 toneladas, cifra que representó una caída de 29,5%.