El 9 de marzo, los mercados sufrieron un "lunes negro". Realmente, negro.

No sólo en Chicago. También en todo el mundo.

El pavor por el conflicto comercial entre EE.UU. y China, ahora, parece pertenecer a tan sólo un cuento para infantes.

Hoy, la economía está dominada por un verdadero pánico global.

El temor por los efectos económicos en el mundo por el brote de coronavirus se ha agudizado.

Para colmo de males, una suerte de guerra entre Rusia y Arabia Saudita acaba de comenzar. Y es por el petróleo.

Veamos qué pasa.

La enfermedad se ha extendido por el mundo. Además de la grave situación asiática, hay focos muy graves en Italia, Francia y España.

Ello golpea directamente sobre la actividad económica lo que, a su vez, incide en la demanda mundial de soja y de los otros granos así como en los derivados agropecuarios y las materias primas en general.

Los países de G7 están tomado medidas. Sus bancos centrales han dispuesto una baja de tasas de interés y la inyección de dinero.

La Reserva Federal sigue disminuyendo las tasas.

Así las cosas, los fondos, atemorizados, liquidan sus posiciones en busca de destinos más seguros. Por eso, se dirigen al oro y a los bonos del Tesoro estadounidense.

¿Terminan acá los problemas? Lamentablemente, no. Y nadie supo predecirlos.

La semana pasada, Rusia Arabia Saudita trataron de llegar a un acuerdo para recortar la extracción de petróleo, en un cuadro de reducción de la demanda por el coronavirus. Pero no lo lograron.

Luego de este fracaso en el acuerdo, Arabia Saudita dispuso el domingo el mayor recorte de sus precios del barril en 20 años.

La baja es de aproximadamente un 30% del precio del petróleo. Algo sin precedentes.

El precio del barril del crudo Brent, este lunes bajó un 26,31 %, hasta cotizar a 33,36 dólares en el comienzo del día. Se trata de la mayor caída en una jornada desde 1991, cuando la primera Guerra del Golfo.

Es cierto que, desde que se conociera la aparición en China del coronavirus, el precio del crudo comenzó a bajar. Pero, la realidad es que este lunes la baja fue dramática.

El gráfico lo muestra con claridad.


En cuanto a la oferta de soja, ¿qué podemos decir?

Brasil ya lleva cosechada más del 50% del volumen estimado.

Se estima una cosecha extraordinaria: alrededor de 125,00 de toneladas.

A la gran oferta en puertas, se suma la mayor competitividad de su producción a raíz de la depreciación de su moneda.

Este lunes, en el mercado local, por soja con entrega hasta el 15 del corriente, el valor de compra fue de U$S 220.

Y en Chicago, por los problemas comentados, los futuros de soja y maíz cerraron con bajas.

El lunes, empezó el paro agrario, en nuestro país. Se trata de un cese de comercialización de granos y hacienda hasta el jueves a las 24hs.

Como vemos, el panorama es muy delicado.

Sólo la incertidumbre es una fija en este momento.