El allanamiento fue ordenado en el marco de una causa penal radicada ante el Juzgado Federal de Primera Instancia de Quilmes, a cargo del Juez Luis Armella, delegada en la Fiscalía Federal de Quilmes, cuya titular es Silvia Cavallo.
La hipótesis de investigación parte de la existencia de una organización que opera en el rubro cárnico que utilizaría una ingeniería para impedir la trazabilidad de la mercadería y los verdaderos destinatarios.
Para ello, los frigoríficos facturan sus ventas a contribuyentes que no fueron los destinatarios reales del producto. Esta maniobra genera la simulación de ventas y pagos, y como consecuencia de ello, un beneficio fiscal en favor de ciertas personas.
En los operativos participaron funcionarios de la AFIP y de la Prefectura Naval Argentina.
Cabe recordar que, con el objetivo de reducir la evasión en IVA y lograr la trazabilidad en las cadenas de valor, la AFIP implementó el Remito Electrónico Cárnico como único documento válido para el traslado carnes y subproductos de faena de las especies bovina, bubalina y porcina.
Están obligados a utilizarlos los frigoríficos y establecimientos faenadores, así como también abastecedores, despostaderos y consignatarios de carnes, entre otros.