CÓRDOBA.- Noviembre marcó una nueva baja para la industria frigorífica local:
la faena cayó 3,8% interanual. Además, la participación de las hembras aumentó
1% en el mismo período y representó el 46,8% del total (la de machos se redujo
7,5%). Con todo, en los primeros 11 meses del año la faena quedó 6,5% arriba de
igual lapso de 2017.
Estos datos se desprenden de un informe de la Cámara de la Industria y el Comercio de Carnes (Ciccra). Según el reporte, las hembras representaron 45,2% de la faena total en lo que va del año, porcentaje 2,6 puntos más alto que un año atrás. Ciccra señaló que la restricción crediticia llevó a los productores ganaderos a desprenderse de vaquillonas (el alza es de 23,2% anual), a la vez que subió su participación en la faena total de 10,2% a 12 por ciento.
Miguel Schiariti, presidente de la Cámara de Industria y Comercio de Carnes (Ciccra),
señaló a LA NACION que le preocupa la faena de hembra que lleva tres meses
consecutivos arriba del 46%: "Esta es época en la que habitualmente no hay
vacas, lo que implica el inicio de liquidación de vientres. Lo que avanzamos en
casi tres años lo vamos a perder en seis u ocho meses".
Planteó que las categorías de consumo cayeron de precio 6% en los últimos 60
días, lo que marca que el productor de cría se siente perjudicado. El ternero
"vale lo mismo que un novillo, cuando debería estar por lo menos 40% arriba;
ante eso hay desánimo. Por el precio del maíz no es negocio el corral; no se
repone lo que venden".
Este año, la mayor proporción del aumento de la producción se exportó (93,5% de las 205,6 mil toneladas adicionales). Las exportaciones crecieron 68% interanual respecto a enero-noviembre de 2017 y su peso sobre el total producido pasó de 10,9% a 17%. La demanda de China y Rusia tracciona la faena de vacas (aumentó 16,6% anual). "De cada 10 kilos que se venden afuera, 5,5 kilos son de vaca, no es para la euforia", advirtió Schiariti.
Consumo
Entre enero y octubre pasado, la producción de carne vacuna fue de 2,8
millones de toneladas de carne con hueso, un alza interanual de 7,9% (en
noviembre la baja fue de 9,5% respecto a octubre). Con un volumen exportado de
44.500 toneladas en el último mes, se habrían enviado 204.300 toneladas al
mercado interno. En términos per cápita, el consumo bajó a 55,1 kilos por
habitante por año.
Para Schiariti, la baja de consumo interno está "directamente vinculada con la pérdida" de poder adquisitivo. "Aun cuando la carne no subió en la misma proporción que el resto de los productos, la billetera es una sola", afirmó.
El precio promedio de la hacienda en dólares subió 0,7% y se ubicó en un nivel de US$1,092 por kilo vivo. El valor en dólares de las categorías destinadas a abastecer el mercado interno disminuyó: ternero, 0,8% mensual; novillo, 0,7%; y vaquillona, 0,6%. En cambio, el valor de los toros aumentó 3,6% en dólares (US$0,959 por kilo vivo), en tanto que el de la vaca subió 0,7% y el del novillito, 0,3% mensual.