En respuesta a una necesidad ambiental, pero también normativa, la empresa ID-First, del Grupo Logiseed América, creó y patentó lo que se presenta como el primer sistema integral para el recupero de envases fitosanitarios.
La oportunidad se hizo patente con la reglamentación de la Ley 27279, que
estableció los requisitos mínimos para el recupero de envases vacíos utilizados
para agroquímicos. La ley exige una gestión segura y con completa trazabilidad,
desde la producción hasta la disposición final del envase. En ese contexto,
Gabriel Otero, Gerente General del grupo patentó el SIRENFI (Sistema Integral de
Recupero de Envases Fitosanitarios) y fue más allá al cerrar una alianza con la
productora de envases Plásticos Lago.
Esta compañía será la que provea los bidones bajo el nuevo sistema, en base a una inversión que se encuentra realizando en una nueva planta en el partido de Ezeiza (de u$s 20 millones). Prevé tenerla operativa para principios de 2019. “Aplica a todo tipo de envases pero lo usaremos para los de 20 litros. En la primera etapa recomendamos que se haga en dos provincias, que pueden ser Buenos Aires, Santa Fe o Córdoba, donde haya buenas comunicaciones e ir implantándolo de a poco”, comentó Otero a El Cronista.
En sí, se basa en un sistema de radiofrecuencia, tecnología que codifica y almacena datos mediante etiquetas que cuentan con un chip de silicio. El seguimiento y lectura de esos datos se realiza a través de antenas instaladas en los puntos de trazabilidad. Por su parte, el sistema de recupero de los envases los proporcionará la propia Logiseed, especializada en logística para el agro. La compañía ofrecerá el servicio de triple lavado de envases en campo y el traslado a los Centros de Acopio Temporal (CAT). En principio serán tres, en zonas como Venado Tuerto, Pergamino y Rojas. Allí se hará el prensado y triturado para su destrucción o reciclado. “Brindamos una solución sin pedirle un peso a nadie”, comentó Otero y añadió que serán los propios fabricantes de agroquímicos quienes impulsen el sistema.
Según sus datos, en el país se utilizan 17 millones de envases fitosanitarios al año, lo que representa 13.000 toneladas de plástico. Muchos de ellos se acopian en galpones, se reutilizan o se entierran o queman. Su recupero y reciclado es el objetivo.