Además, se puso foco en el caso de ACA como empresa líder en invertir
responsablemente cuidando el ambiente. Para la Asociación de Cooperativas
Argentinas (ACA) la sustentabilidad no es solo una palabra que, de tanto
repetir, en ocasiones parece carecer de sentido. Para este conjunto de empresas,
la sustentabilidad, que comprende los ejes económico, social y ambiental, es un
objetivo primordial y lo demuestra con hechos y números que sorprenden. Durante
el Simposio Valor Ganadero, Víctor Accastello, Director de Insumos de la
Asociación, fue el encargado de presentar las acciones y proyectos que la misma
tiene en esta materia.
ACA comprende 150 cooperativas, 50 mil productores, 2 criaderos de semillas, 5 plantas industriales, 46 centros de desarrollo cooperativo, 5 plantas de acopio regionales, 3 puertos (actualmente está construyendo el 4° en Timbúes) y 1 criadero de cerdo. Todos los activos fijos de la Asociación están en Argentina. Además, ACA integra 16 sociedades vinculadas con distinta participación. En todos los emprendimientos prima un concepto: “ACA se desarrolla bajo el paraguas de la buena ética empresarial en el mundo de los negocios, y hace años definimos una política corporativa de gestión sustentable”, asegura Accastello
En cada una de sus inversiones, ACA es líder en cuidado del ambiente. “Apuntamos a tecnologías con bajo impacto ambiental, en las plantas industriales más viejas usamos indicadores ambientales y trabajamos en la mejora continua”, dijo el gerente.
Dentro de sus emprendimientos, cuentan con una planta de recupero de residuos plásticos en la ciudad de Cañada de Gómez (Santa Fe) donde reciclan las 5.000 tn/año que envían al campo en envases de fitosanitarios y silo bolsas. La planta tiene una capacidad de 7.000 tn/año. Con el polietileno recuperado se fabrican nuevos envases, geomembranas o venden a otras empresas. “Así, reducimos la huella de carbono porque ahorramos gas y polietileno virgen, preservamos el agua, el suelo, el ambiente”, señaló Accastello. En el primer año, lograron recuperar 2 millones de kilos de plástico.
Por otra parte, llevan adelante un ciclo virtuoso de producción de alimentos y energía a partir de forrajes y de los efluentes generados por el criadero de cerdos de San Luis. Este establecimiento cuenta con 2.900 madres y 42.000 cerdos, produciendo 1.450 capones de 120 kilos por semana. Con los efluentes del establecimiento, procesados en 4 biodigestores, generan energía eléctrica, logrando 2 MWh que se envían al Sistema Interconectado Nacional. Además, obtienen nutrientes para fertirriego.
Por otra parte, cuentan con ACA Bio, un proyecto de producción de energía y alimentos que se desarrolla en Villa María y permite obtener 171.000 m3 de bioetanol, 6 MWh, granos, burlanda, aceite y CO2, a partir de 420.958 tn de maíz por año. . El almidón del grano de maíz se utiliza para la producción de bioetanol y el resto del grano para producir alimentos. “Además, la huella hídrica de ACA Bio es neutra porque extrae agua de pozo y la usa en un circuito cerrado para regar 60 hectáreas”, remarcó Accastello.
“ACA Bio logró reducir en un 68% las emisiones de gases de efecto invernadero con respecto a las naftas provenientes de hidrocarburos”, destacó el funcionario de la Asociación. “ACA Bio tiene un balance ambiental inmejorable”, agregó.
“Con sustentabilidad en los tres ejes y con reglas parejas y estables, creo
que el campo argentino es ilimitado en cuanto a sus oportunidades para crecer”,
concluyó Accastello.
Aiello: “el cambio climático existió siempre”
José Luis Aiello, doctor en Ciencias de la Atmósfera, sostuvo: “el cambio climático existió siempre. Lo único constante en el clima es su variabilidad”.
Aseguró que “este presente se debe a las emisiones de gases invernaderos. El más importante es el dióxido de carbono”. Informó que “los combustibles fósiles representan el 85% de las fuentes de energía”.
Aiello explicó que “los gases de efecto invernadero se instalaron en la atmosfera desde la Revolución Industrial. Hoy el hemisferio norte emite el 95 % de los contaminantes”, pero indicó que lo importante es tener en cuenta que “cualquier partícula puede hacer efecto en cualquier lugar de la atmósfera”.
Durante su disertación que fue moderada por Alfredo González, jefe de Desarrollo y Tecnología de ACA, José Luis Aiello indicó que “el cambio climático, entre los años 1960 y 2000, representó en Argentina mayores precipitaciones. Esto generó que la frontera agrícola se corrió 200 kilómetros, hacia la región de San Luis y Córdoba; lo que significó más de U$S 20.000 millones de ingresos para el país. Además, generó un aumento de 0,5 grados, se duplicaron los días con olas de calor, hubo inviernos menos rigurosos, aumentaron las sequías”.
Después, el especialista expresó que “el cambio climático tiene escalas largas; la receta es seguirlo en escalas cortas. Tenemos que cazar anomalías climáticas, y usar modelos numéricos, que no dan un pronóstico más allá de 5 días. Tenemos que usar pronósticos de corto plazo; ya que después de 6 días no hay predicción de modelos”
Para finalizar, José Luis Aiello, doctor en Ciencias de la Atmósfera, les
recomendó a los asistentes al Simposio Valor Ganadero 2018, “seguir el corto
plazo, y utilizar los indicadores climáticos para el diseño de la siembra.
Además, seguir buenos pronósticos, como el Servicio Meteorológico Nacional; hay
que saber quién produce esa información y sus antecedentes”.
Más de 500 personas proponen 10 puntos para hacer más atractivas a las
empresas ganaderas
A través de un taller colectivo de conversación colaborativa, los
participantes del Simposio Valor Ganadero, organizado por ACA (Asociación de
Cooperativas Argentinas), generaron soluciones creativas para que los
trabajadores elijan el campo.
Para cerrar la primera jornada del Simposio Valor Ganadero 2018, los más de 500 participantes guiados por Juan Pablo Husni y Diego Sánchez Rivera, realizaron un ejercicio colectivo que consistió en pensar y proponer soluciones a una pregunta central: ¿cómo hacer más atractivas a las empresas ganaderas para que las personas quieran trabajar en ellas? Agrupados en mesas de trabajo conjunto, los asistentes usaron la inteligencia colectiva y el pensamiento colaborativo para responder a la consigna. “La conversación colaborativa, en círculo, es la herramienta más poderosa que tienen las comunidades en sus procesos de transformación”, dijo Husni. “Las personas poseen sabiduría y creatividad para confrontar los desafíos más difíciles. En la metodología de taller la inteligencia emerge, es un proceso creativo para facilitar el diálogo y el intercambio de ideas y conocimientos”, explicó.
Al comenzar el segundo día del Simposio, los participantes presentaron “la cosecha de las soluciones creativas”, es decir, todas las respuestas surgidas del proceso de pensamiento colectivo y las propuestas para hacer más atractivas las empresas ganaderas para los trabajadores. La lista incluyó diez puntos: participación de los empleados en decisiones y metas; implementación de incentivos económicos; fomento el sentido de pertenencia; ofrecimiento de buena infraestructura; bienestar, calidad y confort laboral; capacitación continua; equilibrio entre lo social y lo laboral; concepción de la producción en el campo como una empresa; fomento del desarrollo personal; puesta en valor de los beneficios de la vida rural.
Finalizado la actividad, los participantes se mostraron muy satisfechos de
haber formado parte en del taller y destacaron del pensamiento colectivo y del
trabajo conjunto para la generación de ideas superadoras.
“Programa Más Terneros” en Santa Fe
La ministra de la Producción de Santa Fe, Alicia Ciciliani, fue la encargada
de abrir la segunda jornada del Simposio Valor Ganadero 2018, organizado por ACA
(Asociación de Cooperativas Argentinas)
Ciciliani presentó el “Programa Más Terneros” que lleva adelante la provincia, que brinda asistencia técnica y financiera a los productores a través de veterinarios de acuerdo a un plan de trabajo anual con el objetivo de aumentar la eficiencia productiva de los rodeos de cría mediante la adopción de tecnología y el desarrollo de buenas prácticas ganaderas. El plan de trabajo incluye evaluar la capacidad reproductiva de los toros previo al servicio e identificar los enfermos, infértiles o de baja aptitud reproductiva para su reemplazo por animales fértiles y de genética superior; mejorar el manejo pre-servicio con el objetivo de aumentar el nivel de preñez de las vacas aplicando vacunas reproductivas y ajustes de manejo según la condición corporal de los vientres; monitorear el estado corporal de los vientres durante el servicio y aplicar las vacunas correspondientes a los terneros nacidos; y realizar el diagnóstico de preñez a las vacas y vaquillonas de 1º servicio, ordenar el rodeo y ajustar la carga animal del campo para iniciar un nuevo ciclo productivo.
“En Santa Fe, de cada dos vacas solo se desteta un ternero. La baja productividad es el gran problema de toda la economía argentina, tanto en lo público como en lo privado. Por eso estamos llevando adelante este programa entre el Estado, los profesionales veterinarios e ingenieros agrónomos y los productores, trabajando juntos, vinculados”, explicó la ministra.
Otro de los problemas que la ministra ha detectado, es “la falta de mano de obra capacitada, técnicos que trabajen en el día a día en el campo, es una limitante que hoy estamos encontrando, por eso estamos armando un programa para capacitar en oficios de campo”, contó.
Además, Ciciliani indicó: “Estamos trabajando con mucha preocupación también
el tema de la sanidad. No estamos en la condición sanitaria que hoy el mundo
exige. El tema sanitario es primordial para las ventas a mercados externos. Otra
cuestión es la de la resistencia antimicrobiana, es un tema estratégico a nivel
mundial que desde la provincia estamos abordando”.
Lo necesario para cambiar
El cierre del Simposio Valor Ganadero, organizado por ACA (Asociación de
Cooperativas Argentinas), fue dedicado a lo motivacional, a reflexionar acerca
del cambio que se deben generar para seguir adelante.
“La ganadería tiene que cambiar, pero no va a cambiar por sí sola. Tenemos que cambiar nosotros para generar los cambios necesarios”, fueron los puntos centrales.
Sergio Sinay, ensayista, investigador sobre temas existenciales y sociales, y periodistas, se refirió a “Lo necesario desde uno mismo para cambiar”. Aseguró que “la palabra cambio cobra fuerza cuando atravesamos situaciones de crisis”. Habló sobre valores, ética, solidaridad, propósitos compartidos, confianza, empatía; temas que generaron la atención de los productores en el Simposio Valor Ganadero.
En el cierre, Juan Bautista Segonds, especialista en trabajo en equipo y conferencista, habló sobre “Cambié mi actitud y todo cambió. Cuáles son las herramientas”. Segonds fue el coach holístico del equipo de tenis argentino ganador de Copa Davis en 2016.