Más de 44 millones de bovinos fueron vacunados contra la fiebre aftosa durante la segunda campaña de 2017, según los datos del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa).
Simultáneamente, se inoculó contra la brucelosis bovina a más de 7 millones de terneras de entre 3 y 8 meses de edad de todo el país –con excepción de la provincia de Tierra del Fuego, reconocida como libre de la enfermedad– y se alcanzó de esta manera un porcentaje de cobertura del 98,75%.
Como es habitual, se aplicaron distintas estrategias de vacunación contra la fiebre aftosa, dependiendo de la provincia o región. Las provincias de Buenos Aires (salvo el partido de Patagones), Entre Ríos y Corrientes vacunaron a los bovinos y bubalinos de todas las categorías.
En el resto de las provincias, la vacunación incluyó solamente las categorías menores (terneros/as, vaquillonas, toritos, novillitos y novillos), exceptuando aquellas provincias que ejecutan una estrategia especial de vacunación en establecimientos de riesgo como La Rioja, San Juan y Mendoza, donde aplicaron la vacunación en todas las categorías bovinas/bubalinas.
Es importante destacar que la zona del cordón fronterizo unificó su estrategia y vacunó a las categorías menores de esa región. Por último, algunos planes de Salta aplicaron una nueva estrategia, que consiste en vacunar a las categorías menores en establecimientos de riesgo.
La vacunación contra la fiebre aftosa es una de las principales estrategias de prevención que permite mantener una situación epidemiológica estable de la enfermedad en la República Argentina.