Las condiciones climáticas para esta campaña se han ido cumpliendo según lo previsto, sobre todo en lo que respecta a las elevadas temperaturas y la escasez de precipitaciones; sin embargo, la falta de rotaciones agrícolas provoca que el inóculo de la enfermedad permanezca en los residuos de las plantas infectadas del cultivo anterior, o bien por el uso de semillas infectadas, lo cual ha provocado que en muchos lotes se detecte la presencia de la enfermedad.
La Mancha Marrón de la Hoja (Septoria glycines) es causada por un hongo que se manifiesta desde los primeros estadíos del cultivo. Los síntomas se pueden observar en cotiledones, hojas unifoliadas y trifoliadas del tercio inferior de la planta. Las lesiones aparecen como manchas irregulares de color marrón oscuro y las hojas se tornan rápidamente amarillas y caen prematuramente. Condiciones ambientales con temperaturas mayores a 21 °C y una elevada humedad son predisponentes para el desarrollo de la enfermedad, causando importantes defoliaciones en la planta y anticipando la madurez del cultivo. Al avanzar el ciclo, los síntomas se hacen más evidentes. Además, el viento y el salpicado provocado por las precipitaciones, ayudan a la dispersión del inóculo.
Se sabe que el efecto de las enfermedades sobre el rendimiento del cultivo depende del nivel de incidencia y severidad de la enfermedad y también de la condición del cultivo. Éste último punto es muy importante, más aún en un año como el actual, donde las condiciones ambientales actuales han mostrado ser desfavorables para el desarrollo de los cultivos en gran parte del país. Por esto, es necesario el monitoreo constante de los lotes y la realización de los controles químicos a tiempo, además de un correcto manejo de cultivos que incluya prácticas tales como la rotación, el uso de semillas de calidad (libre de inóculos), la utilización de diferentes variedades de soja y fungicidas con diferentes MDA en controles químicos.
En lo que respecta a control químico se requieren herramientas de alta eficiencia de control, que combinen diferentes modos de acción y aseguren la protección de los cultivos, evitando la reducción en los rendimientos. Una opción que ofrece la compañía ROTAM® es Ykatu®, un fungicida sistémico para el control de Septoria y enfermedades de Fin de Ciclo. Ykatu® combina la destacada acción preventiva y antiesporulante de la Azoxistrobina, con la acción preventiva, curativa y erradicante del Tebuconazole, lo que asegura un amplio espectro de control durante un período prolongado del cultivo, además de reducir el riesgo de reinfección y aparición de cepas resistentes.
Ykatu® puede ser utilizado en mezclas con diversos insecticidas en una estrategia de control integrada de plagas. Khospi® es un insecticida sistémico de Rotam® que cuenta con la acción de volteo de un piretroide y la residualidad de un neonicotinoide, actuando por contacto e ingestión en el control de chinches y orugas e interviniendo en la transmisión de estímulos en el sistema nervioso central. Khospi® combina el efecto de volteo del Bifentrín con el control residual del Imidacloprid, con un amplio espectro de control de plagas en el cultivo de soja.
ROTAM® es una empresa con presencia global, cuya principal fortaleza es brindar soluciones agronómicas para los distintos mercados, con una diversificada cartera de productos en una amplia gama de cultivos.