El operador estadounidense de granos Archer Daniels Midland Co (ADM) llegaría esta semana a un acuerdo para comprar Bunge Ltd. Así lo informó la agencia internacional Bloomberg, citando a fuentes familiarizadas con el asunto: "ADM está en conversaciones avanzadas para adquirir Bunge, un rival más pequeño", informó, en una negociación que ya se había puesto sobre la mesa un mes atrás cuando se conoció del interés de la compañía, que se sumaba a la intención de otra multinacional como la suiza Glencore, quien realizó una oferta el año pasado, que fue rechazada.
De concretarse la operación se crearía otro gigante en la comercialización de granos a nivel mundial, tras el agresivo ingreso de la china Cofco, que desde 2014 invirtió más de u$s 3000 millones para quedarse con las operaciones de Nidera y Noble, lo que le permitió meterse en el grupo de las multinacionales que operan productos agrícolas.
A nivel local, entre ambas se convertirían en la mayor firma exportadora de materias primas. Teniendo en cuenta los últimos datos disponibles (hasta noviembre de 2017) de la Subsecretaría de Mercados Agropecuarios (perteneciente al Ministerio de Agroindustria), la virtual nueva compañía le quitaría el primer lugar a la estadounidense Cargill, y se ubicaría también por encima de Cofco-Nidera (tomando en cuenta lo exportado en granos, aceites y subproductos).
Entre enero y noviembre del año pasado, ADM y Bunge exportaron casi la misma
cantidad de granos desde los puertos argentinos. La primera, unas 4,147 millones
de toneladas, y la segunda unas 4,331 millones, contando maíz, trigo, soja,
sorgo y cebada. Entre las dos superarían a la principal exportadora Cargill
(7,153 millones), y a su inmediata perseguidora Cofco (6,396 millones, contando
también la exportado por Nidera). Sumandole aceites y subproductos, Cargill
superó las 11,4 millones de toneladas exportadas, mientras que Cofco-Nidera
quedó en 8,8 millones, mientras que la nueva sociedad ADM-Bunge llegaría a 12,9
millones de toneladas.
Claro que habría ciertos reparos para esta ecuación. "Está la disyuntiva de ver si se suman las dos operaciones y potencialidades de las dos compañías o si se reparte de manera más equitativa entre el resto de las compañías. No siempre es lineal", analizó un especialista del mercado de granos, que además agregó que dicha operación tendría que pasar por autorizaciones legales y de defensa a la competencia, con la posibilidad de desprenderse de operaciones. Tal el caso de Bayer que le tuvo que vender a BASF divisiones de semillas y herbicidas, para poder quedarse con Monsanto.
Bunge opera varias terminales portuarias en el país, principalmente en Rosario (junto a Aceitera General Deheza -AGD en Terminal 6, por ejemplo) y en Bahía Blanca, además de estar presente en el Complejo Industrial de Campana, con producción de fertilizantes. En las últimas semanas fue noticia por el despido de 100 operarios en el marco de un "proceso de readecuación", que encara en la planta del norte bonaerense. En noviembre del año pasado, la compañía anunció una reorganización de su estructura comercial y corporativa a nivel global, que contemplaba una reducción en la cantidad de unidades operativas, que pasaron de cinco a tres regiones: Norteamérica, Sudamérica y Europa-Asia.
Esto en el marco de reducción de márgenes de rentabilidad que está afectando a los grandes operadores globales y que empuja los procesos de concentración, como se dio en el negocio de semillas, cuyo último impacto fue la adquisición de Monsanto por parte del grupo alemán Bayer en u$s 66.000 millones, y siguió a la adquisición de Syngenta por parte de ChemChina y a otra mega fusión con Dow-Dupont. Según informó Reuters, las acciones de Bunge subían un 6% y las de ADM avanzaban más de 1% en las operaciones previas a la apertura de Wall Street. Al cierre del viernes, Bunge tenía un valor de mercado cercano a los u$s 11.000 millones y ADM de u$s 23.000 millones.