Dependiendo de las lluvias que fueron bastante desparejas en todo el país, siguen complicados los entores y si no se toman medidas, directamente no habrá preñeces.
En aquellas zonas que recibieron más lluvia los toros están volviendo a trabajar bien, pero en los predios donde el clima apretó y se hizo sentir sobre los campos, hay muchas vacas en anestro, según datos recabados por El País a través de varios veterinarios de campo que son referentes en temas vinculados con la reproducción animal. “Los resultados de las inseminaciones de noviembre -en vaquillonas- no son malos. Lo más complicado son los ganados de segundo entore y piezas de cría, que en general no están en mal estado, pero están con celos trancados”, aseguró a El País desde Lavalleja el Dr. Gabriel García Pintos, especialista que participa anualmente en el Taller de Diagnósticos de Gestación de INIA Treinta y Tres.
No sólo se van a obtener preñeces caras, porque las medidas a tomar -sea destete precoz o temporario- insumen dinero, sino que será otro año más con cola de parición si la gente sigue alargando los servicios, como sucedió hace dos años cuando el clima mostró todo su rigor sobre el rodeo en plena temporada de servicios.
A su vez, el Dr. Guillermo de Nava, otro referente para el norte del país, publicó en su cuenta de Facebook que está finalizando el monitoreo del entore 2017/18, donde en su caso evaluó 11.708 vacas paridas en 15 predios, ubicados en los departamentos de Salto, Paysandú, Tacuarembó y Cerro Largo, donde encontró “un promedio de 49,1% de vacas en anestro, que resulta ser el más alto hallado desde el año 2000 en el que comenzamos aplicando esta tecnología en los rodeos de cría”.
De Nava dijo que el 18,5% de las vacas están en anestro superficial, mientras que el 30,6% estaba en anestro profundo. Completan los datos, las vacas con cría al pie preñadas de los primeros días de la estación reproductiva y el promedio de vacas ciclando, fue del 19,6% y 30,9%, respectivamente. El profesional consideró que “si estos predios son representativos de lo que ocurre con los rodeos de cría en el norte del país, entonces se puede predecir que la tasa de preñez global va a bajar con respecto a otros años”, estimo.
“Aunque registramos mejor ciclicidad al comienzo de los servicios en las vaquillonas, lo que hace suponer buenas tasas de gestación en esta categoría, la proporción de las vacas de cría es mayor en el rodeo, por lo que el balance general será seguramente de una merma en el comportamiento reproductivo”.
En los últimos días, el Instituto Plan Agropecuario (IPA) recordó a los productores que se enfrenta “una situación de déficit forrajero de cara al invierno, por lo que se deberá realizar un constante monitoreo de la situación forrajera y de los animales. La utilización de la escala de condición corporal y la medición de la altura de pasto, son 2 acciones de fácil relevamiento y utilización y nos dan una acabada información sobre la situación en cada establecimiento, dijo el IPA.