A nivel internacional en 2017 vimos que las grandes compañías de insumos
agropecuarios apostaron a las startups. En octubre de 2017, John Deere ofertó
305 millones de dólares para comprar Blue River, un robot accesorio al tractor
que permite detectar y rociar malezas entre las filas de cultivos.
También Syngenta incursionó en la compra de startups y adquirió un software de gestión, llamado Ag Connections, creado por emprendedores norteamericanos.
Por su parte, Dupont puso su mirada en Granular, una plataforma digital que
ayuda a los agricultores a llevar adelante negocios más rentables.
Así, la idea que se afianzó el año pasado es que los innovadores y los grandes jugadores del mercado de insumos empiezan a jugar juntos no sólo para proveer mejores productos sino para ganar mercado.
En tanto, a nivel local por segundo año consecutivo se llevó adelante el
Programa Agroemprende 2017, del Ministerio de Agroindustria. El programa
recorrió cinco provincias, tuvo 800 participantes y más de 240 proyectos
premiados. Esta iniciativa del sector público busca fortalecer proyectos
emprendedores en territorios rurales, mediante del desarrollo de un plan de
acción o de negocios para los emprendimientos.
La visión del emprendedor tiene la capacidad de detectar la necesidad e innovar para resolver problemas productivos. Mientras el sector público apoya el surgimiento de proyectos, los privados suman sus iniciativas.
En 2017 el Mercado de Futuros de Rosario, Rofex, entre otras iniciativas, concretó una alianza con el fondo de capital de riesgo Draper Cygnus. La alianza permite lograr capitales para empresas innovadoras. Esto puede dar nuevos aires a los emprendimientos AgTech y generar unicornios que vengan de este sector.
Además, el año pasado nacieron nuevos espacios de intercambio promovidos por empresas, el sector público, las nuevas incubadoras y aceleradoras.
Lo que trae 2018
Las plataformas de comercio electrónico de a poco van ganando terreno entre los productores agropecuarios. La razón que esgrimen los productores que se suman al comercio electrónico son dos: mejores precios y la posibilidad de comparar productos.
Un caso paradigmático es la plataforma FBN Direct, que recientemente recibió inversión por unos 110 millones de dólares en una serie D. Permite a los agricultores comprar y vender completamente en línea. Además de ofrecer una oferta variada, pone a disposición precios y comparte información genética sobre semillas.
Otro de los servicios que presta FBN Direct es la venta de insumos, y así elimina a los intermediarios. Una compañía de alimentos de cualquier parte del mundo puede trabajar con FBN y con los productores para comprar directamente sin que haya puentes entre ellos.
En la Argentina estamos en el momento correcto, donde todos los actores necesarios del ecosistema ya pusieron el tema en su agenda, tal es así que se ha conformado una mesa nacional para unir a todos ellos en una agenda común y crear una marca país.
En tanto, Agrostartup nació con el foco de dar un lugar físico a todos estos actores para que puedan conectar con los emprendedores que estarán trabajando allí. Aapresid lo puso en su estrategia y plan para este año. Y el Gobierno de la Ciudad creó un programa de incubación de emprendedores con foco en la agrotecnología.
En 2018 hay que ayudar a los emprendedores a que generen las soluciones que se adapten a las necesidades de los productores.