CÓRDOBA.- Según un informe de la Bolsa de Cereales de Córdoba, la producción
de soja en esta provincia fue de 13,2 millones de toneladas en el ciclo
2016/2017, un 11% menos que en la campaña anterior. En este contexto, el valor
bruto de la producción de soja cayó unos US$ 1200 millones, de 5976 millones de
dólares en la campaña 2015/2016 a US$ 4770 millones en el ciclo 2016/2017.
Además, según el trabajo, Córdoba dejará de recibir 5096 millones de pesos por
la pérdida de 272.400 hectáreas durante la campaña.
El informe marca que hubo una baja del 10% en los precios de exportación al momento de la cosecha, provocando una caída del 20% en el Valor Bruto de la Producción. Los menores rendimientos agronómicos y la caída de valores derivaron en una contracción de los indicadores económicos de 46% en campo propio y del 74% en campo arrendado.
En la última cosecha se registró una reducción en superficie sembrada del 11%
y del 6% en el rendimiento en todos los departamentos de la provincia.
El impacto por anegamiento en soja en la campaña 2016/17 disminuyó un 51% respecto al ciclo anterior, con 272.400 hectáreas, un valor que equivale al 6% del área sembrada. Los departamentos más afectados fueron General Roca (61.000 hectáreas), Presidente Roque Sáenz Peña (51.000 hectáreas) y Marcos Juárez (40.000 hectáreas).
El reporte señala que, al igual que lo ocurrido en la campaña pasada, las inclemencias climáticas afectaron el avance de cosecha, provocando demoras. Sin embargo, la situación pudo sortearse sobre el final de la trilla debido a la disminución considerable de las lluvias hacia fines de junio, permitiendo lograr un escenario de cosecha similar a la campaña 2014/15.
La caída de la producción y la baja de precios hacen que, en términos monetarios, la producción represente 4770 millones de dólares en ingresos para la provincia. A nivel empresa, los menores rendimientos agronómicos y un menor precio en la zona de los puertos de Rosario derivaron en una contracción de los indicadores económicos tanto en campo propio como campo alquilado.
Así, en campo propio el margen neto fue de 188 dólares por hectárea, con una caída del 46% frente al resultado de la campaña 2015/2016. En el campo arrendado el margen por hectárea fue de 58 dólares, un 74% menor al ciclo previo. Además de la merma en los resultados económicos, muchos productores sufrieron pérdidas totales o parciales por el agua. Un cálculo en base a hectáreas perdidas, rendimientos ponderados por campaña y precios de exportación a cosecha muestra que la pérdida de ingresos potenciales asciende a 325 millones de dólares.