La diversificación en los manejos de los sistemas ganaderos y mixtos exige la aplicación de nuevos conocimientos y tecnologías. Muchos planteos requieren verdeos de alta y rápida producción de pasto en otoño y granos o silajes para la suplementación estratégica. En este contexto, los técnicos del INTA Bordenave –Buenos Aires– desarrollaron la cebada Nélida INTA como respuesta tecnológica que aporta a esta demanda.
De acuerdo con uno de sus obtentores, Fernando Gimenez –especialista del grupo de mejoramiento genético y calidad vegetal del INTA Bordenave–, “la nueva variedad de cebada forrajera es un verdeo multipropósito que se destaca por la rápida y abundante producción de forraje de calidad y por la habilidad para producir forraje y grano o silajes, en un mismo año, lo que se conoce como doble propósito”.
Nélida INTA es un nuevo cultivar de cebada (Hordeum vulgare) destinada para pastoreo directo, con excelente aptitud para ser usada como cultivo doble propósito, al producir pasto rápidamente en otoño e invierno, para rebrotar para producir granos o silajes, en un mismo año.
“Este nuevo cultivar supera en un 20 % al cultivar Mariana INTA, que era el único con estas características”, señaló Gimenez.
En cuanto a la producción de forraje verde, Gimenez aseguró que este cultivar “es ideal para comenzar las cadenas forrajeras de verdeos y complementar pasturas, avenas y raigrases anuales”.
“También puede ser utilizado como puente verde, incluso haciéndole algún pastoreo temprano. Para su utilización doble propósito es recomendable hacer uno o dos pastoreos y clausurar el lote a los animales a partir de junio o julio, según la región y la fecha de siembra”, recomendó el especialista de Bordenave.
Como las cebadas cerveceras, Nélida INTA posee espiga de dos hileras, lo que le da buena aptitud granífera y la ubica entre las de mayor potencial de rendimiento de granos de alta calidad para la alimentación animal, con alto contenido de proteínas. “Esta característica es muy favorable para la producción de silajes de planta entera”, aseguró su obtentor.
Asimismo, posee una excelente tolerancia al frío y muy buen comportamiento a las principales enfermedades que afectan al cultivo, como escaldadura (producida por el hongo Rhynchosporium Scelais), mancha en red (producida por el hongo Drechlera teres) y BYDV (Virus del mosaico amarillo de la cebada).
Este nuevo cultivar posee una buena adaptabilidad a diferentes ambientes, pero es más recomendada para la región centro oeste de Argentina, donde se encuentra la principal cuenca lechera. Nélida INTA es comercializada por la empresa Jelagro S.A. de Villa María bajo un convenio de vinculación tecnológica con el INTA.