Reforzar el equipo, sí. Pero por sobre todo la decisión de las salidas de Carlos Melconian, del Banco Nación, y de Daniel Chain, de la Secretaría de Obras Públicas, robustece la autoridad y las determinaciones del trío de funcionarios más cercano al presidente Mauricio Macri: el jefe de Gabinete, Marcos Peña, y sus dos vicejefes coordinadores, Mario Quintana y Gustavo Lopetegui.
O como el propio jefe del Estado los definió frente a todo su equipo en la
última reunión de gabinete ampliada del año pasado: "Son mis ojos y mi
inteligencia, y cuando ellos piden algo lo estoy pidiendo yo". Los que no dieron
relevancia o interpretaron equivocadamente ese mensaje presidencial salieron
eyectados del Gobierno. "Casi todos entendieron el significado de esas palabras,
pero algunos no terminaron de comprehender... Con hache", dijo a la nacion uno
de los hombres con acceso diario al despacho del Presidente.
Crítico del camino que eligió el Gobierno para salir de la crisis, Melconian
proponía medidas más severas para paliar el déficit fiscal. Macri, en cambio, se
decidió por un camino más gradual; evitar medidas de shock fue uno de los
mantras del primer año de gestión. Este camino seguirá sin cambios bruscos
durante este año. Melconian nunca pudo procesar esa derrota ni superar esa
incomodidad.
"El caso de Melconian fue para buscar más homogeneidad conceptual en el
equipo económico", explicó otro de los estrechos colaboradores del jefe del
Estado. Así, Melconian se sumó al camino que había inaugurado el ex ministro de
Hacienda Alfonso Prat-Gay.
El cambio ya estaba definido desde hacía varios días. Su reemplazante, Javier González Fraga, recibió el lunes la llamada de Quintana, quien lo convocó a la Casa Rosada. El drama por las inundaciones en las provincias de Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba y Entre Ríos demoró el anuncio unos días. Finalmente, ayer el Gobierno dio a conocer que Melconian no formaba parte del equipo económico de Macri.
Distinto fue el caso de Chain. Hace más de un mes que su ticket de salida estaba sellado. Hace semanas que en los despachos de la Casa Rosada daban por confirmada la dimisión del ahora ex secretario de Obras Públicas. Pero, a diferencia de Melconian, la disposición la tomó su jefe directo, el ministro del Interior, Rogelio Frigerio.
"Va en línea con los muchos cambios de segundas líneas en los ministerios", revelaron cerca del jefe de Gabinete. En todo momento remarcaron que quien resolvió despachar a Chain fue Frigerio, aunque siempre con la venia del Presidente. En ese sentido resaltaron una continuidad con lo que ocurrió a fin del último año en el Ministerio de Salud, a cargo de Jorge Lemus, donde renunciaron su viceministro Néstor Pérez Baliño y otros funcionarios de segunda línea.
Todos los cambios tienen un mismo objetivo: reforzar y aceitar el funcionamiento del equipo, siempre bajo la atenta mirada y el acompañamiento de Peña, Quintana y Lopetegui. Todo pasa por el tridente que puso Macri para seguir el minuto a minuto de la gestión.
"Lo que más me preocupa es que el equipo funcione. Ésa es la única manera de que el Estado funcione. Nuestro objetivo es poner el Estado al servicio de la gente, no de la política", agregó otro de los privilegiados funcionarios que hablan a diario con Macri.
Cercanos al Presidente
A diferencia de Prat-Gay, Melconian y Chain compartían un rasgo común: su cercanía con el Presidente. El economista fue asesor del Presidente durante sus años como jefe de gobierno porteño e incluso fue candidato a senador por Pro en 2007. Durante la campaña electoral de 2015 fue uno de los nombres que sonaron para ocupar el Palacio de Hacienda, lugar que terminó en manos de Prat-Gay. Habitué en los picados que el Presidente organiza en la quinta presidencial de Olivos, donde se destaca como delantero, ya sin responsabilidades ejecutivas, Melconian se apuntó en la lista de posibles reemplazantes de Martín Lousteau, en la embajada argentina ante Estados Unidos.
Chain conoció a Macri cuando trabajaba como ejecutivo de Socma. Cuando el Presidente llegó a la jefatura porteña, lo designó como ministro de Desarrollo Urbano, cargo que ocupó durante ocho años. Eso sí, su decisión de acompañar a Gabriela Michetti en la interna contra Horacio Rodríguez Larreta en la sucesión de Macri al frente de la ciudad lo alejó de Macri y de su mano derecha, Peña.
"Cada vez que creamos que el equipo puede mejorar, si no hay resultados haré otros cambios", anticipó hace casi dos semanas en una entrevista radial el Presidente. ¿Se terminaron los cambios por el verano?, preguntó la nacion a uno de sus principales colaboradores. Sólo Macri puede responder esa pregunta, se excusó. Con los nuevos cambios, el Presidente ratificó el nuevo mensaje a su tropa: no hay intocables.