Las altas temperaturas y el viento armaron un combo que alimentó los incendios en La Pampa: en dos semanas se quemaron medio millón de hectáreas, el 3% de la superficie de la provincia. Y 200 mil se consumieron en los últimos dos días, en seis focos de los cuales tres siguen activos. El Sistema Nacional de Manejo del Fuego envió cuadrillas desde Córdoba para asistir a los Bomberos y el personal de Defensa Civil local.
Por los alambrados arrasados por el fuego hay animales sueltos y hay recomendaciones a los turistas que circulan por las rutas nacionales 22 y 154 para que tengan precaución. Los focos activos están ubicados al sureste en La Adela, en Perú (en el sur provincial) y en Santa Isabel, en el oeste provincial.
Los incendios controlados son de La Pastoril (hubo 29.000 hectáreas afectadas), Colonia Emilio Mitre (10.200) y Limay Mahuida (100 mil), en el centro oeste provincial.
La situación más crítica la viven los pobladores y productores de la zona de La Adela, un pueblo del sureste de La Pampa que está río de por medio con el pueblo de Río Colorado, Río Negro. El fuego está a ambos lados del río.
El fuego acechó la población de La Adela. Las llamas rodearon el pueblo. Llegaron a pocos metros de la estación de servicio y el motel del Automóvil Club sobre la ruta 22. Además los bomberos y el personal de Vialidad municipal trabajaron en la protección de la planta gasífera de Transportadora de Gas del Sur.
A la noche, las llamas estuvieron a pocos metros de otra estación de servicio, Petropampa, que fue protegida por los Bomberos, integrantes de Defensa Civil y los propietarios y el personal.
En la jornada de este lunes, en las rutas nacionales 22 (cruza de este a oeste y une el Alto Valle con la Costa Atlántica) y la 154 (tiene sentido norte-sur) que se cruzan en la entrada a La Adela hubo filas de hasta 400 vehículos. Las dos rutas permanecieron cortadas entre el mediodía y las 19.30. Se habilitaron por unas horas, pero cerca de la medianoche del lunes fueron cerradas otra vez porque los incendios quemaron los alambrados y hay muchos animales sueltos a un tramo de casi cien kilómetros. A las 6 de hoy fueron rehabilitadas a la circulación del tránsito, con la luz del día.
Durante el año, el régimen de lluvia en La Pampa estuvo por encima del promedio histórico. Hubo unas 300 mil hectáreas inundadas en el norte provincial, en límite de la zona productiva de la pampa húmeda. En el resto del territorio pampeano ese exceso de lluvias generó pastizales, que ahora son el combustible de los incendios.
El intendente de La Adela, Juan Barrionuevo, dijo que "vivimos momentos angustiantes. Tuvimos que proteger el pueblo. El fuego estuvo a metros de la estación de servicio Petropampa y de la estación de TGS (Transportadora de Gas del Sur). También tuvimos que cuidar la base de Oldevall, una petrolera".
El fuerte viento, con ráfagas de 50 a 60 kilómetros, fue el principal motor del fuego. "No se podía usar el avión hidrante. No podía despegar por el viento", dijo el intendente. "Les pedimos que tengan cuidado a los turistas, hay muchos y hay animales sueltos", dijo.
"El avance del fuego ayer era arrasador. Daba miedo. Hoy lo que cambió es el viento, Rotó hacia el sur y eso alivió un poco el incendio. Pero sigue el fuego y pueden volver otros focos", dijo el jefe comunal La Adela.
En el departamento de Caleu Caleu se quemaron unas 250 mil hectáreas de un total de un millón. En cercanías de La Adela hubo 25 mil hectáreas arrasadas. Las cuadrillas que llegarán en la tarde de este martes desde Córdoba serán destinadas a la zona de La Adela y a los otros focos en el oeste pampeano, en Santa Isabel.