CORDOBA.- La mejora en los tambos en los últimos meses no alcanzó para sacar del podio de las crisis más profundas en los últimos 20 años al ciclo 2015/2016 y sin el programa de compensaciones oficiales directamente hubiera sido el de peor rentabilidad (detrás de 1999/2000 y 2001/2002).

El ciclo 2016/2017 aparece un poco mejor por la recuperación de los precios internacionales y porque el ajuste de producción permitió mejorar el valor de la leche cruda.

Estas son algunas de las conclusiones del informe de los economistas del Ieral Juan Manuel Garzón y Nicolás Torres junto al Ministerio de Agricultura de Córdoba. Las mejores perspectivas no implican que se está a salvo de un nuevo ciclo con rentabilidad, en especial en establecimientos de menor productividad.

En diálogo con La Nación, Garzón indicó que es clave que el precio de exportación de la leche en polvo argentina esté arriba de los US$3000 la tonelada: "Lo ideal sería US$3500, pero en esa franja el valor empieza a traccionar", dijo.

El otro aspecto que mencionó es la necesidad de que se recupere el consumo interno que este año cayó entre 3 y 4%, básicamente en el primer semestre. Ayudará la desaceleración de la inflación, la mayor actividad económica y una mejora del poder de compra de los asalariados.

Subrayó que el contexto internacional fue adverso -la Argentina exporta alrededor del 20% de su producción- por lo que para Garzón el 2016/2017 será un "ciclo de equilibrio porque hay stock alto de productos terminados; ese exceso presiona los precios y las industrias no pagan más a los tambos".

"Los números van a estar mejor, pero no sobrará nada", definió y graficó que, por caso, en la cuenca noroeste de Córdoba se requiere una vía creciente de precios en los próximos siete meses, con valores superando al menos los $ 5 por litro en marzo, para no volver a cerrar con números negativos.

Del análisis se desprende que los subsidios a los tambos alcanzaron para atenuar los indicadores negativos pero no para modificar el signo. Su impacto fue aumentar en tres puntos porcentuales la rentabilidad de los establecimientos.

En cambio, fue inverso el efecto de la reducción de los derechos de exportación en granos (soja y derivados). Para un ciclo productivo de 12 meses, el impacto de este cambio de política comercial se estima en una caída de ROAs de tres puntos porcentuales.

"La diferencia entre un caso y el otro es que el impacto del cambio de política comercial es permanente, mientras que el del programa de subsidios es temporario, una única vez", señala el economista.

Los tambos cordobeses resignaron "mucho capital" en el ciclo 2015/2016. En dos casos monitoreados por el trabajo de los economistas, uno perdió $ 6,1 y el otro $ 7,1 por cada $ 100 invertidos, luego incluso de haber cobrado subsidios.

Hay que considerar que la inversión por litro ronda entre $ 4,36 (modelo cuenca Villa María) y $ 4,96 (modelo cuenca noreste. En Córdoba, la producción durante el ciclo 2015/16 se habría aproximado a 3170 millones de litros y la pérdida de capital estaría en un rango de entre $ 843 a $ 1100 millones, según el modelo productivo prevaleciente en la provincia.