Los casi 50 proyectos presentados por la oposición para reformar el impuesto
a las ganancias tienen como denominador común un incremento del mínimo no
imponible mucho mayor -entre el 25% y el 50%- que la iniciativa del Gobierno,
que comenzará a discutirse el martes próximo en la Cámara de Diputados.
El proyecto oficial propone un aumento del 15% del mínimo, una actualización
gradual de las escalas en los próximos tres años y una reducción de las
deducciones especiales, entre otros ejes. Así pasarían a pagar este tributo los
asalariados que ganen más de $ 21.712 netos sin hijos y $ 25.231 netos para el
trabajador casado y con dos hijos menores. El costo fiscal del proyecto es de
unos $ 27.000 millones.
El martes comenzará a debatirse el proyecto en una sesión informativa en Diputados, a la que asistirán el jefe de la AFIP, Alberto Abad, y funcionarios del Ministerio de Hacienda y Finanzas.
El massismo propone un incremento cercano al 50% en el mínimo no imponible, con un piso de $ 48.000 en bruto para casados con hijos y $ 34.000 para los solteros. Además sugiere multiplicar las escalas por cinco el año próximo, por ocho en 2018 y por diez en 2019; el costo fiscal es de $ 48.000 millones, pero prometen compensar la mayor parte con la eliminación de exenciones a las mineras, al juego, al dólar futuro y a las Lebac. El massismo sabe que para el Gobierno será más fácil negociar con ellos que con otros bloques de la oposición.
El justicialismo no kirchnerista propone un mínimo de $ 60.000 para los
casados con dos hijos, la actualización automática anual de las escalas y una
serie de excepciones para no pagar Ganancias: los aguinaldos, las embarazadas,
los jubilados -salvo los de privilegio-, las horas extras y los bonos
especiales. El presidente del bloque, Oscar Romero, dijo a LA NACION que "el
proyecto que mandó el Gobierno es de una mezquindad absoluta" y propuso crear un
"fondo compensador para que los administradores del juego sean gravados, de modo
que las provincias no pierdan con el cambio de Ganancias".
"Es posible que el Gobierno ceda con el porcentaje del mínimo no imponible, pero
la diferencia es muy amplia. Sé que el Gobierno tiene vocación de diálogo, vamos
a ir con una postura razonable y no queremos mostrar que nuestro proyecto es el
mejor: el objetivo es sacar la ley y ojalá que sea consensuada, para que no
tengamos que discutirlo todos los años", expresó.
En cambio, el senador salteño Juan Carlos Romero consideró "razonable" el proyecto del Gobierno. "Esto es lo que se puede ahora; es una desgracia tener un impuesto al trabajo, pero no se pueden perder todos los ingresos de golpe. Nadie puede perder más recursos en las provincias y los municipios. Es lo posible, aunque no sea lo ideal, en lugar de subir gastos como lo están haciendo en Diputados. Muchos senadores pensamos igual", dijo Romero a LA NACION.
El diputado Carlos Heller, del Partido Solidario, explicó que en marzo presentó un proyecto de reforma del mínimo no imponible y de las escalas. "Una familia tipo con $ 50.000 de salario bruto no pagaría nada y un soltero que gane $ 50.000 pagaría $ 731 por mes. En un salario de $ 100.000 pagaría $ 13.000 un casado y $ 17.000 un soltero", detalló. En cuanto a las deducciones, agregó "una deducción por intereses hipotecarios para la vivienda, con un tope de $ 134.000 anuales y deducción por alquileres de $ 67.000 anuales".
Heller no tiene mucha confianza en que el Gobierno busque consensos más allá del massismo y del PJ no kirchnerista, "como ocurrió con la mayoría de los proyectos".
Margarita Stolbizer considera positiva la actualización de las escalas, aunque piensa que el mínimo debería subir un 25%, al menos, y contener un índice de actualización automática.
Victoria Donda -junto con el ex diputado Claudio Lozano- propone subir la alícuota máxima al 42% y elimina exenciones a la renta financiera por $ 34.000 millones. En cuanto al mínimo no imponible, lo fija en $ 43.000, actualizado en forma automática. Agrega la deducción por alquiler y elimina el pago por todos los suplementos salariales: productividad, antigüedad, calificación y zona desfavorable.
Néstor Pitrola, del Partido Obrero, dijo que su propuesta prevé la anulación de Ganancias de los salarios de convenio colectivo y en jubilaciones, y fija un mínimo de $ 69.000. En cuanto a las escalas, se "multiplica por 18 la tablita de Machinea, ajustada por inflación", detalló. "Vamos a denunciar a Massa porque hizo un show mediático, sin un proyecto concreto, por lo que sólo atenúa el problema", advirtió.
El kirchnerismo, que durante sus 12 años de mandato no tocó las escalas de Ganancias y minimizó el problema -al expresar que sólo afectaba al 10% de los trabajadores-, también tiene algunos proyectos sobre esta cuestión.
Qué propone la oposición
Los distintos proyectos sobre el impuesto a las ganancias
Frente Renovador: Quiere elevar el mínimo no imponible a $ 48.000 (casados) y $ 34.000 (solteros). Promete compensar la menor recaudación con eliminación de exenciones a las mineras y al juego
GEN: Margarita Stolbizer estima necesario aumentar un 25%, al menos, el mínimo no imponible, además de actualizar las escalas y contener un índice de actualización automática
Bloque Justicialista: Propone actualizar las escalas en forma automática y un piso de $ 60.000, con excepciones a embarazadas, jubilaciones (salvo las de privilegio), horas extras, aguinaldos y bonos
Libres del Sur: La iniciativa de Victoria Donda fija el mínimo no imponible en $ 43.000 (aumenta un 42%) y elimina exenciones a la renta financiera por $ 34.000 millones. Agrega deducciones por alquiler
Partido Obrero: El proyecto de Carlos Heller fija el límite para pagar ganancias en $ 50.000 e incluye deducciones por intereses hipotecarios para la vivienda (con un tope máximo) y por alquileres
Partido Solidario: Néstor Pitrola suprime el cobro de ganancias en salarios y jubilaciones y fija un mínimo no imponible de $ 69.000. Para los monotributistas, será equivalente a tres canastas familiares.