Un caso de usurpación de tierras en Salta despertó una fuerte polémica
en esa provincia por la falta de acción judicial y política ante la denuncia de
un productor, que tiene bloqueado el ingreso a un establecimiento de 1400
hectáreas en la zona de Embarcación, en el norte salteño.
Desde hace doce días, el productor Huberto Bourlon no puede disponer de esa
explotación, dedicada a la producción forestal-ganadera, porque un grupo de 20
personas se lo impide. Lleva ocho denuncias realizadas por esta situación, pero
no logró que la justicia local intervenga para una solución. En cambio, en el
ínterin ya sufrió la rotura de alambrados, la quema de corrales y mangas para la
hacienda y el fin de semana aparecieron en llamas cortinas forestales que se
usan para prevenir la erosión del suelo por el viento y como refugio para los
animales. Según Bourlon, no hay banderas políticas en la toma, pero, dijo a LA
NACION, "los que están atrás son del Frente para la Victoria".
En rigor, en la red Twitter, bajo el perfil @elguisodebagre, Bourlon viene
apuntando contra "cabecillas" locales que habrían impulsado la usurpación.
También vía esta red está realizando un desesperado pedido de ayuda. Arroba en
sus tuits desde el gobernador Juan Manuel Urtubey hasta el presidente Mauricio
Macri.
En los últimos días, quien se comunicó varias veces con él fue Hugo Rossi,
subsecretario de Coordinación Política del Ministerio de Agroindustria de la
Nación. Ayer, en tanto, acompañado por dirigentes de Prograno y de la Sociedad
Rural de Salta, además de productores con otros casos similares, se reunió con
varios ministros de Urtubey. En la mesa estaban funcionarios de las áreas de
Justicia, Seguridad y Producción. De allí se llevó una promesa de ayudar
"institucionalmente", pero no mucho más.
De acuerdo con el productor, hace unos cinco años se formó en el campo de un vecino, pegado al pueblo y a una distancia de cinco kilómetros de su establecimiento, una comunidad que se autoproclama de "originarios". Luego de un tiempo sin conflicto, empezaron los problemas con esa comunidad. "Veníamos conviviendo sin problemas, hasta que a fines del año pasado 30 de estas personas irrumpieron en el campo armadas de machetes y acompañadas por personas que se identificaban como funcionarios de Derechos Humanos de Salta y con un GPS tomaron puntos que delimitan la propiedad. Luego de este hecho, esta gente comienza a ponerse violenta y a romper los alambrados y amenazar a mi personal", expresó Bourlon a LA NACION.
Lejos de resolverse el conflicto, esas personas comenzaron a entrar en el campo y a robar la madera, según el productor. Hace unas semanas, Bourlon había encontrado una persona dispuesta a hacerse cargo del lugar y empezar a realizar trabajos para acondicionar el establecimiento. Pero se llevó una sorpresa al encontrarse con la ocupación.
"Cuando estamos ingresando nos encontramos, primero, con que habían volteado árboles sobre el camino para impedir el ingreso y con un piquete de 50 personas, entre hombres armados de cuchillos y machetes, mujeres, niños y adolescentes con piedras y hondas", detalló.
Bourlon hizo denuncias y buscó que actúe la fiscal Lorena Martínez, sin éxito aún, según señaló.
El productor alertó que esta clase de hechos se está dando en otros lugares de Salta. "Esto se está poniendo cada vez más conflictivo, no soy el único", advirtió.