El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimenaria (SENASA) firmó con su par ruso un acuerdo para retomar los envíos de harina de soja a ese país, suspendidos desde febrero pasado, por discrepancias en la certificación de eventos genéticamente modificados. Este acuerdo se logró, apenas 10 días después de la visita del ministro de Agroindustria Ricardo Buryaile a la Federación de Rusia.
En el día de ayer, el presidente del SENASA, Jorge Dillon y el Jefe del Servicio Federal Veterinario y Fitosanitario de la Federación de Rusia, Sergey Dankvert, firmaron un protocolo mediante el cual las partes acordaron las condiciones para la exportación de harina y pellets de soja de origen transgénico de Argentina a Rusia, como así también a los demás países de la Unión Económica Euroasiática (Armenia, Bielorrusia, Kazajistán y Kirguistán). El acuerdo incluye la forma en la que SENASA certificará cada embarque; como así también los registros que tienen que efectuar las empresas exportadoras de dichos productos.
Si bien a lo largo del año hubo un intenso intercambio entre los dos servicios sanitarios para aclarar el problema, la solución al mismo comenzó a tomar forma en las conversaciones técnicas que mantuvieron técnicos de SENASA con sus pares rusos en el marco de la visita que realizó el ministro Buryaile entre el 18 y 21 de octubre pasado, encabezando una importante comitiva oficial y privada. Las negociaciones continuaron el lunes 31 de octubre y el acuerdo en cuestión ha sido incorporado al Acta de la XII Comisión Intergubernamental Argentino-Rusa para la Cooperación Económica, Comercial y Científico-Tecnológica, que sesionó en esta capital los días 1 y 2 de noviembre.
El ministro Buryaile celebró el acuerdo alcanzado y señaló que "esto demuestra que estamos transitando el camino correcto, al impulsar políticamente las negociaciones técnicas que nos permiten recuperar la confianza de nuestros socios comerciales y resolver los problemas que enfrentan nuestros productos en los mercados internacionales." Por su parte, Dillon, destacó "que, a través de este acuerdo, hemos recuperado un mercado tradicional de Argentina, que demanda más de un millón de toneladas para la alimentación de sus animales".
En 2015, Argentina exportó a la Federación de Rusia 85.000 toneladas de harina y pellets de soja. Cabe aclarar que las estadísticas nacionales no reflejan la realidad del comercio, ya que los volúmenes exportados a este destino de estos productos por nuestro país son mucho más elevados porque gran parte de los embarques se triangulan a través de los puertos europeos.
Por último, en el marco de la reunión de la Comisión Mixta Argentina-Rusa que se está desarrollando actualmente en la Argentina, los equipos técnicos continuaron avanzando para lograr el acceso al mercado ruso de otros productos de la oferta exportadora nacional, tales como semen y embriones bovinos, bovinos en pie para reproducción, harina de carne, hueso y sangre, abejas reinas, como así también la ampliación de la nómina de plantas procesadoras de productos de la pesca registradas para exportar a Rusia.
Además de las autoridades de ambos entes sanitarios, estuvieron presentes en el acto de firma el vicepresidente del SENASA, Guillermo Rossi; la coordinadora de Relaciones Internacionales del Organismo, Maria Inés Vica; y el director Nacional de Relaciones Agralimentarias Internacionales del Ministerio de Agroindustria, Omar Odarda. La comitiva extranjera estuvo integrada, entre otros, por la directora del Organismo Federal Estatal Presupuestario, Julia Koroleva y la jefa del Departamento de Investigaciones Biológicas del Laboratorio de Análisis de Inocuidad y Calidad de Productos, Irina Kozireva, ambas del Centro de Evaluación de Granos y de Cereales y Productos derivados de Rusia.