Veremos en detalle más adelante los datos, pero resultaron muy negativos para el maíz y levemente positivos para trigo y soja. Sin embargo localmente el maíz logra sostenerse, mientras que en soja la presión de la cosecha nueva es innegable, y en trigo estamos a la espera de que aparezca Brasil, pero ya con algunas señales positivas.
Retomando entonces los reportes del USDA, comencemos por el de intención de siembra, que era el más esperado por el mercado. Se venía hablando de que el productor norteamericano obtendría mejores resultados económicos con maíz que con soja, y que por tanto habría un rebalanceo de área. De hecho en el OUTLOOK de febrero, el maíz sumaba 800.000 ha y la soja perdía apenas 80.000 ha. Sin embargo en las proyecciones previas se pensaba que el pasaje podría ser menor, y que de hecho la soja no iba a perder área.
Finalmente los datos del USDA realizados con consultas a productores al 1 de marzo, mostraron un área de maíz que estaría en casi 38 mill.ha., unas 2,3 mill.ha. mayores a las del año pasado. Esto superó lo esperado por el mercado en 1,4 mill.ha. e implica una oferta muy abultada de maíz para la próxima campaña, que se sumaría a stocks ya de por sí muy elevados.
Pero este no fue el único dato negativo que el maíz dubo digerir. Además las existencias salieron en 198,3 mill.tt. unas 200.000 tt más que lo esperado lo que implica menor demanda que lo esperado.
Por otra parte China anunció un cambio muy importante en su política maicera esta semana: antes subsidiaba la producción de maíz poniendo un precio sustancialmente mayor al internacional. El Estado compraba a sus productores a este nivel, pero luego los usuarios del maíz preferían reemplazarlo por otros forrajes más baratos, que el trigo caro del Estado. De allí la demanda de DDG (residuo de la industria de etanol), sorgo y cebada. Esta política dejó a China con stocks elevadísimos de maíz, que analistas locales creen superiores a 200 mill.tt. El cambio es que ahora en vez de subsidiar el maíz, China pasaría a dar un subsidio al productor independientemente de lo que haga, mientras que el precio del maíz interno dejará de ser impactado por la política. Esto augura que la compra de forrajeros Chinos este año podría caer estrepitosamente.
Si bien Chicago bajó fuerte tras los reportes del USDA, localmente los precios se mantienen. Esto pasa porque Argentina está recibiendo mucha demanda externa en el corto plazo, con el aditamento de Brasil, que tuvo una campaña de exportación tan agresiva el año pasado, que se quedó sin maíz. Sin embargo para julio todo esto cambiaría rápidamente y cuando los exportadores compren el maíz que tienen comprometido con los operadores externos, podríamos ver un ajuste negativo importante.
En lo que hace a soja, el USDA estimó la intención de siembra en 33,3 mill.ha. perdiendo 200.000 ha respecto al año pasado, y quedando unas 320.000 ha por debajo de lo que el mercado esperaba. Esto resulta alcista, pero la variación no es tan significativa. En tanto el reporte de stocks mostró existencias de 41,7 mill.tt. casi 700.000 tt menos que lo esperado por el mercado. Esto puede parecer poco significativo, pero implica que el consumo norteamericano de la oleaginosa es más fuerte de lo que suponíamos.
Pero además de esto los aceites siguieron mostrando una potencia inusitada. El aceite de palma en Malasia no para de tocar nuevos máximos, por la expectativa de menor producción asociada a la falta de humedad del fenómeno Niño, a lo que se le suma India. Esto está mejorando el margen de molienda y llevando al poroto como materia prima a las nubes.
Con todo esto los fondos se pusieron claramente del lado comprador, lo cual puede ser un arma de doble filo ya que en algún momento tomarán ganancias, y al mercado le cuesta romper los máximos de fines del año pasado.
Pensando hacia más adelante, tanto el maíz como la soja tendrán que pasar el mercado climático norteamericano, que en algún momento pondrá nervioso al mercado y lo hará subir. En ese sentido hoy las condiciones de humedad son buenas, y hay lluvias en el pronóstico, por lo que la siembra no debería ser un problema. El inconveniente podría venir más adelante. Los datos del IRI para los grandes lagos marcan algunos pulsos secos, y temperaturas elevadas.
Pero algo que los analistas norteamericanos no están mirando y que va a ser un elemento muy importante más adelante, es la intención de siembra en Argentina. Tras la eliminación de las trabas a la exportación y de los derechos de exportación en maíz y trigo, amén de la devaluación, los cereales le ganarán área a la soja. La superficie de soja podría caer 1 a 2 mill.ha. y la de maíz subir 1 a 1,5 mill.ha. Lo de soja implicaría una reducción de producción muy importante para el mercado internacional, entre 5 y 10 mill.tt. si el clima además se torna más seco (recordemos que se espera que salgamos del año niño y pasemos a una niña). En maíz habían 4 mill.tt. más, número que no asusta a nivel internacional, pero que se suma a un mercado ya de por sí muy ofrecido.
Finalmente tenemos al trigo, y aquí no tiene tanto sentido detenernos en los fundamentos que hacen a Chicago: perspectivas secas, y heladas que habrían dañado a los cultivos, junto con menor intención de siembra, tanto en EEUU como en Canadá. El mercado es más bien regional, y lo que todos nos preguntamos es si Brasil aparecerá, cuando y si se llevará el trigo de baja proteína de Argentina.
Hasta fines de febrero el trigo Argentino puesto en los molinos Brasileños resultaba más caro que el trigo local. Por esto no tenía lógica que importaran. Sin embargo al momento el trigo Argentino estaría llegando puesto en los molinos de Brasil hasta 7% más barato que el local. Esto abrirá el apetito Brasileño, que ya añadió que no tendría problemas para manejar la calidad.
En este mismo sentido los compromisos de venta de los exportadores locales, comenaron a exceder sus compras, por lo que de continuar esta tendencia deberíamos ver un mercado reactivado en poco tiempo más.
BALANCE
ALCISTAS
La difusión del reporte de intención de siembra 16/17 del USDA para EEUU quitó del panorama algunos elementos que hasta ahora venían pesando y puso más el acento en las variaciones de área (negativa para maíz, levemente positivas para soja).
En tanto en soja los fondos incrementan su posición neta comprada y esto comienza a ser un elemento negativo.
Finalmente también el clima norteamericano empieza a tomar mayor preponderancia, con problemas concretos por falta de humedad y heladas en trigo, y por expectativa de clima seco en junio para maíz y soja
En lo que hace al maíz, hay muchos elementos externos negativos, entre ellos además de la mayor área de siembra en EEUU, está el cambio del sistema de subidio en China que impactará en menor demanda forrajera de este país, pero la buena demanda coyuntural por maíz Argentino y el hecho de que los exportadores siguen vendidos en este producto ayudan a que el precio por ahora siga firme.
SOJA
ALCISTAS
Buen ritmo compras
China Menor área EEUU
Firmeza aceites
BAJISTAS
Altos stocks 15/16
Entrada de cosecha Sudamericana
Leve posición comprada de fondos
DUDAS
(+) Menor área Argentina 16/17
(+) Buen ritmo exportaciones EEUU
(+) Clima EEUU mediano plao
MERCADO DE MAIZ:
ALCISTAS
Brasil necesita comprar corto plazo
Fondos vendidos Exportadores Argentinos vendidos
BAJISTAS
Mayor aumento de área en EEUU que lo esp.
Grandes existencias internacionales
DUDAS
(-) Cambio régimen subsidio China
(-) Mayor safrinhia en Brasil
(-) Aumento de área en Argentina
(+) Clima EEUU mediano plao ;
TRIGO:
ALCISTAS
Problemas climáticos EEUU
Fondos vendidos
Necesidad de Brasil Exportadores Arg Vendidos
BAJISTAS
Alta disponibilidad de trigo en el mundo
Baja calidad trigo Argentino
DUDAS
(+) Continuidad del clima en EEUU
(-) Intención de siembra en Argentina