“La calle se llenó de tomates, mediodía, verano, la luz se parte en dos mitades de tomate, corre por las calles el jugo (…) y sobre la mesa, en la cintura del verano, el tomate, astro de tierra, estrella repetida y fecunda (…)”, escribió Pablo Neruda en Oda al tomate. Y fue esa misma fiesta la que se desató en la Oficina de Desarrollo Local del INTA AMBA en Florencio Varela, en el marco del Programa ProHuerta (INTA/ Ministerio de Desarrollo Social de la Nación) en el Taller de elaboración de conservas de tomate, que se realizó recientemente.
Con un salón lleno de participantes, la nutricionista del INTA AMBA Maria Andrea Montagnani, junto con Cristina Rabus contaron los secretos del tomate para luego ponerse manos a la obra. Las casi 30 personas que se sumaron a esta experiencia elaboraron más de 40 kilos de conserva de tomate y cerca de 100 frascos de salsas y mermeladas.
El tomate utilizado fue cultivado en el la Estación Experimental de Gorina,
del Ministerio de Agroindustria de Provincia de Buenos Aires, en un ensayo
llevado adelante por Guillermo Cap y María Eugenia Strassera del INTA AMBA,
sobre cinco variedades de tomates provenientes del INTA La Consulta, y la
Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales de la Universidad Nacional de La
Plata.
Vale decir que el INTA AMBA trabaja en este municipio del Conurbano bonaerense en la asistencia a los productores y emprendedores familiares, apuntando al mejoramiento de los diferentes sistemas productivos, con técnicas sustentables de bajo impacto ambiental apropiadas a la agricultura familiar local.
Entre todos
“Agradecemos la buena onda y la responsabilidad de los participantes ya que la elaboración tuvo una dificultad extra que fue la de extraer las semillas para su conservación por lo que fue necesario que todo el proceso se realizara manualmente y sin mezclar las diferentes variedades”, destacó Rabus.
Participó del encuentro el técnicos del INTA AMBA en Florencio Varela Sebastián Fajardo quien estuvo a cargo de cuidar las semillas de los tomates. Fue en este sentido que durante la jornada se realizaron mediciones y se comparó rendimientos y características de cada variedad.
“Toda la información que obtuvimos en la jornada será procesada y compartido en breve. Así como también haremos una degustación de las mermeladas y salsas que elaboramos”, agregó Cristina.
Así productores, promotores de ProHuerta, estudiantes de la Universidad Nacional Arturo Jauretche (Unaj) junto a muchos vecinos llevaron su delantal de cocina y su cofia (o pañuelo) para cubrir la cabeza e hicieron una verdadera fiesta del tomate. O su propia Oda.