El presidente de la Cámara Argentina de Productores Integrados de Pollos (CAPIP), Ricardo Unrrein, advirtió ayer que los criadores del sector están "trabajando a pérdida total", y aseguró que la situación es "peor que la que atraviesan los productores de leche".
El dirigente argumentó que los criadores reciben de los frigoríficos "entre $ 2,70 y $ 3" por animal, mientras que su producción les cuesta 4,50 pesos.
Además, dijo que el precio del pollo que se vende en los supermercados, donde "el kilo en góndola está rondando los 40 pesos", surge de una negociación de esos locales con los frigoríficos.
"El frigorífico nos provee el pollito bebé de un día de edad y nosotros se lo devolvemos con 48 días de edad y con un promedio de peso de unos tres kilos", explicó Unrrein. Y protestó: "En este momento estamos trabajando a una pérdida total: no ganamos nada porque el frigorífico a nosotros nos está pagando entre $ 0,90 y $ 1 peso por kilo de pollo, es decir que por cada uno nos dan entre $ 2,70 y $ 3, y a nosotros nos cuesta $ 4,50 producirlo".
"Nosotros estamos peor que los de la leche", graficó en referencia a la grave situación que le toca vivir a los productores de leche, que también afrontan problemas de rentabilidad.
Unrrein puntualizó que "el kilo de pollo en góndola está rondando los $ 40 y a la salida del frigorífico está a 22 pesos".
"A nosotros se nos ponen los pelos de punta de escuchar esos precios porque por el trabajo de criarlo, que es la mayor parte de la cadena de producción, nos pagan $ 0,90", concluyó.
Esta situación se refleja también en un trabajo difundido por la Cámara Argentina de la Mediana Empresa (CAME), donde se muestra la diferencia de valores que se dan entre el momento en el que se produce un alimento y se comercializa al público.
De acuerdo con el Indice de Precios en Origen y Destino (IPOD), que elabora la entidad, en el segmento de animales y vegetales se alcanzó una brecha de 7,1 puntos en enero, el IPOD que agrupa a cuatro productos animales (huevo, carne de pollo, carne de ternera, y leche), se ubicó en 4,08%, un 8,5% mayor al IPOD animal de diciembre pasado.
El IPOD es un indicador elaborado para conocer lo que ocurre en los precios de los principales productos agropecuarios que se venden en fresco en el mercado desde que salen del campo y hasta que llegan al consumidor. Como se puede observar, en el recorrido que hacen hasta que llegan a la góndola, se generan un conjunto de alteraciones que suelen multiplicar por varias veces el costo de origen de muchos de ellos, completó el índice.