El 11 de diciembre comenzará la demolición del cepo al dólar, que será gradual pero se hará sin demoras. En cambio, la racionalización de los subsidios se ejecutará con tiempos más laxos para evitar el impacto doloroso de un tarifazo. La idea de Mauricio Macri es amortiguar mediante un acuerdo social el salto peligroso entre la unificación del tipo de cambio y el aumento de los precios. Su eficacia para dar este paso determinará el éxito o el fracaso de la primera etapa de su gestión.
Macri terminó de elegir los cargos más sensibles de su gabinete. La idea de acelerar la deconstrucción del cepo cambiario hizo emerger a la superficie a su arquitecto, el economista Alfonso Prat Gay, quien finalmente será el ministro de Hacienda y Finanzas. Luego de haber sido el presidente del Banco Central con Néstor Kirchner y de acompañar a Elisa Carrió en la Coalición Cívica, este ex alumno del Cardenal Newman tendrá la compleja tarea de sanear una economía recesiva y desquiciada. Fue el regalo que recibió ayer, justo el día en el que cumplió 50 años.
Rogelio Frigerio podrá ejercer su pasión por la política y su conocimiento de las economías regionales en el ministerio del Interior. Y Federico Sturzenegger tendrá la misión de encabezar el desembarco macrista en un Banco Central despojado de reservas. La Cancillería quedó para Susana Malcorra, una ingeniera que fue ejecutiva de elite y que, como diplomática, se convirtió en la mano derecha del secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki Moon. Muy pocos la conocen en la Argentina pero ella conoció en ese organismo a casi todos los presidentes del planeta.
