Sostener, cuidar y pulir cada día la prosa del relato kirchnerista deja huellas notorias en las cuentas públicas. En su segundo mandato, que finalizará en diciembre, el Gobierno terminará por gastar más de 12.500 millones de pesos para sostener la proliferación de cadenas nacionales, la propaganda oficial en las transmisiones de fútbol y la realización de múltiples piezas gráficas y audiovisuales para celebrar a la presidenta Cristina Kirchner, según se desprende de números oficiales.
El número es gigante. Equivale a 15 veces los fondos que destinó el Gobierno
el año pasado para hacer escuelas. Por caso, destinó $ 796,46 millones para
construir 51 establecimientos en el marco del programa Acciones para Más
Escuelas, Mejor Educación.
Si se lo mide en términos anuales, tan sólo el año pasado destinó 3387 millones de pesos para abastecer los dos mayores pulmones de la propaganda oficial, por lo que cuadruplicó los fondos para las escuelas.
Si se lo mide en pesos, como le gusta al kirchnerismo hacer referencia a la hora de citar cifras, este año será consagratorio en materia de gasto para apuntalar la imagen y la gestión presidencial: se destinarán $ 4014,2 millones para nutrir los dos mayores programas dedicados a esa tareas: se trata de Prensa y Difusión de los actos de gobierno (de allí surgen los fondos para cubrir los costos de cada una de las apariciones presidenciales en cadena nacional) y el Fútbol para Todos, la mayor herramienta propagandística de todos los tiempos.
Ese número, de todas maneras, podría ser más alto debido a la capacidad del
jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, para reasignar partidas presupuestarias, una
práctica que ha sido habitual desde que el kirchnerismo llegó al poder, en 2003.
Hay otras menudencias presupuestarias que, de manera más indirecta, tienen que ver con la imagen oficial, como los gastos de otros organismos del Estado o bajo su gestión.
Por ejemplo, en el primer semestre la Anses destinó $ 521 millones para publicidad, y el Banco Nación, otros $ 17 millones. Aerolíneas Argentinas e YPF también hicieron su aporte, aunque menor.
El gasto oficial en propaganda no deja de crecer desde el primer mandato de Cristina Kirchner. Aunque los efectos de la inflación son innegables, los incrementos son también fortísimos.
En 2008, cuando aún no existía el programa Fútbol para Todos, el Gobierno gastó $ 406,89 millones en Prensa y Difusión, un número que hoy parece ínfimo. Y en 2011, cuando terminó la primera presidencia de Cristina Kirchner, llegó a $ 687,4 millones. Hoy, el número de 2008 se quintuplicó.
Si se suman los montos de ambos programas, el gasto en la imagen del gobierno trepó 73% en 2010, 36% en 2011, 55% en 2012, 17% en 2013, 10% en 2014 y, hasta ahora, 20% este año. En el segundo mandato, además, las erogaciones en esos rubros fueron 3,2 veces mayores que las del primero.
Trabajo a destajo
Las tareas de la Secretaría de Comunicación Pública, a cargo de Alfredo Scoccimarro, fueron en aumento de la mano de Cristina Kirchner. Su foja de servicios es enorme. Tan sólo el año pasado (última información disponible) produjo 471 spots audiovisuales; el diseño, la coordinación, la gestión, la supervisión y el monitoreo de campañas publicitarias sobre la gestión de gobierno; tramitó 411 campañas institucionales "de gestión"; organizó 1638 licitaciones, y armó más de 1500 contenidos periodísticos sobre la gestión de gobierno, tanto en formato gráfico como digital, que se difundieron en medios de comunicación de todo el país.
También incorporó el lenguaje de señas a varios programas de la TV Pública, la interpretación de todos los actos por cadena nacional, el subtitulado oculto de los discursos presidenciales y la ampliación de la cuota de subtitulado en el canal youtube/casarosada; la cobertura de más de 450 eventos de gobierno entre actos oficiales y audiencias, más de 100 conferencias de prensa.
A esto debe surmarse el monitoreo "cuantitativo y cualitativo" diario de 20 medios gráficos y audiovisuales nacionales y 64 provinciales.
La última documentación disponible no informa sobre la publicidad ordenada por la Secretaría. El último número es de 2013: nada menos que 36.000 órdenes de publicidad en el año.
El trabajo del Fútbol para Todos fue aún mayor. En 2014 se transmitieron 764 eventos. Entre ellos, 386 partidos de Primera A, 265 del Nacional B, 36 de la Copa Argentina y 65 partidos del Mundial de Brasil. La producción histórica de ese ciclo, que comenzó en 2009, superó en 2014 las 3210 emisiones.
En toda la gestión, el gobierno de Cristina Kirchner destinó más de $ 16.250 millones a los dos principales programas de propaganda.
Su marido, el ex presidente Néstor Kirchner, resultó mucho más austero en ese rubro: en su último año de gestión utilizó menos de $ 264 millones para promocionar su gestión