“El paro trastocó un poco los planes de mucha gente, porque estamos complicados en la parte ganadera por la inundación que está afectando a una amplia zona de la provincia de Buenos Aires” indicó a “Siempre que llovió…paró”, Ignacio Gómez Alzaga, Vicepresidente segundo del Centro de Consignatarios del País.
Luego explicó que “la entrada de 18.000 cabezas del viernes revela que había unas 8.000 cabezas más de lo normal, que debería haber venido la semana que viene (por esta) y la gente adelantó las ventas. Hoy estamos previendo que el lunes (por hoy) va a haber entrada de 2000 cabezas, porque como se carga el domingo, fuera del paro, algunos piensan que no se rompe la medida”, destacó.
En el programa que se emite los sábados de 10 a 12 por Radio Colonia, AM 550, Gómez Alzaga aseguró que “hay gente que está complicada y está armando para sacar hacienda a feedlots, a otros campos o a la venta, que todavía por una cuestión de caminos no pudieron hacerlo, por lo que algo de hacienda va a ir, pero en general creo que va a haber un buen acatamiento del paro”.
También expresó que “es un momento complicado, porque las épocas que menos producen daños con inundaciones es pasando la primavera, porque la mayoría de la hacienda ya esta parida y la evaporación hace que sean más cortas. Las peores son las que se producen al principio del invierno, porque agarran a las vacas en la última etapa de la preñez, el agua se queda durante todo el invierno y afectan a toda la hacienda. La de ahora es intermedia, porque se está produciendo al final del invierno, pero justo en el momento de la parición. Ya se ven efectos en algunos campos, que los terneros nacen en el agua, o la vaca tiene que caminar bastante para alimentarse y cuando vuelve no encuentra al ternero y se producen mortandades”, explicó Gómez Alzaga.
Por otro lado afirmó que “ésta situación es bastante parecida a la del año pasado cuando se calcula que faltaron 400.000 terneros producto de las inundaciones. Hoy todavía no es tanto, el agua está bajando rápido porque corre toda, el suelo no la puede absorber. También los caminos están complicados porque están llenos de agua”.
Para finalizar Gómez Alzaga comentó que “la "ventaja" que hay es que la ganadería, pese a que no está en un momento floreciente, tiene expectativas de que con el cambio de gobierno se produjera algunas mejoras en el mercado. Hoy la agricultura prácticamente no es rentable, por lo que se está dando una pequeña vuelta a la hacienda. Hay una amplia parte de la zona ganadera que van a estar buenos los campos esta primavera y van a poder absorber parte de lo que se deteriore el proceso productivo en la Cuenca del Salado, que es la más afectada por el agua”.