Los precios del maíz y de la soja cayeron con fuerza ayer en la Bolsa de Chicago y acentuaron el retroceso evidenciado en las dos semanas precedentes. Entre los fundamentos negativos se destacaron el clima, que ha vuelto a acompañar el desarrollo de los cultivos estadounidenses; la liquidación de contratos por parte de los fondos de inversión especuladores, y el descenso de los principales indicadores bursátiles globales.

Al momento de fijar los ajustes de la rueda, las pizarras mostraron quitas de US$ 7,68 y de 7,57 sobre los contratos septiembre y diciembre del maíz, cuyos valores resultaron de 146,84 y de 150,98 dólares por tonelada. Desde el cierre del viernes 10 del actual, con precios de 171,15 y de 175,19 dólares, estas posiciones acumularon bajas del 14,20 y del 13,82%, respectivamente.

En cuanto a la soja, los contratos agosto y noviembre retrocedieron ayer US$ 11,02 y 11,67 en la plaza estadounidense, mientras que sus ajustes fueron de 353,20 y de 342,91 dólares por tonelada. En la comparación con el cierre del viernes 10 del actual, de 379,20 y de 375,62 dólares, estas posiciones resignaron un 6,86 y un 8,71 por ciento.

Durante la rueda ayer, los fondos de inversión liquidaron 30.000 contratos de maíz, equivalentes a 3,81 millones de toneladas del cereal, y 14.000 contratos de soja, por poco más de 1,90 millones de toneladas de la oleaginosa. Las ventas de los especuladores -se acentuó la tendencia de las ruedas anteriores- tuvieron varias razones, pero la principal fue la necesidad de "recoger ganancias" para cubrir las pérdidas registradas en el mercado accionario, impulsadas por la previsión de un crecimiento menor al esperado de la economía de China.

Además, ante la mejora del clima sobre la zona núcleo de producción de granos gruesos de los Estados Unidos, el maíz y la soja perdieron atractivo para los especuladores, dado que la posibilidad de recortes productivos importantes en la campaña 2015/2016 ahora es menos probable. De hecho, lo que resignaron ambos granos en las últimas semanas fue el denominado "premio climático" que los mismos fondos de inversión habían construido desde el inicio de la segunda quincena de junio, cuando las lluvias excesivas sobre el Medio Oeste los habilitaron para especular con eventuales mermas en las cosechas.

Tras el cierre del mercado, ayer el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, pos sus siglas en inglés) ponderó el 70% del maíz estadounidense en estado bueno/excelente, por encima del 69% de la semana pasada. Un año atrás, en la previa de la cosecha estadounidense récord, la proporción de cultivos en condición óptima era el 75%.

Respecto de la soja, el USDA relevó un 62% en estado bueno/excelente, sin cambios frente al informe anterior y por debajo del 71% vigente un año atrás, también en el camino de la cosecha récord.

Dos factor bajista adicionales para el maíz y para la soja son la debilidad del petróleo, que ayer cerró en 47,39 dólares por barril, y la firmeza del dólar, no sólo frente al euro -ayer la divisa europea logró una leve apreciación-, sino también contra el real, que se depreció en las últimas cuatro jornadas. Para las exportaciones brasileños de granos y subproductos, el escenario actual mejora su competitividad y torna más atractivas sus mercaderías en el exterior.

Para el trigo estadounidense ayer las bajas fueron menos relevantes, dado que la posición septiembre en Chicago y en Kansas perdió US$ 3,40 y 2,94, en tanto que su ajuste fue de 184,64 y de 183,44 dólares por tonelada. Sin embargo, la nueva caída del el grano fino fue una más dentro de una larga serie de ruedas bajistas, producto del rápido avance de la cosecha de las variedades de invierno, que ya cubrió el 85% del área apta.

Con la referencia del ajuste del viernes 10 del actual, de 211,67 y de 210,27 dólares por tonelada, la caída acumulada del contrato septiembre en ambas plazas quedó ayer en el 12,77 y en el 12,76%, respectivamente.

Pocas ventas en Rosario

Como sucede habitualmente con los movimientos de precios externos, fue la soja la que registró el mayor impacto en el mercado disponible local. Por tonelada de soja con entrega inmediata para las terminales de la zona del Gran Rosario, las fábricas ofrecieron 2000 pesos, 50 menos que el viernes pasado. "Si bien algunos compradores escuchaban contraofertas, no había en la plaza un volumen de mercadería relevante que justificara otorgar mejoras significativas. Así, el volumen intercambiado fue muy bajo", explicó ayer la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).

El escenario fue similar para la soja con entrega en Bahía Blanca y en Necochea, dado que los exportadores ofrecieron $ 2000 por tonelada, $ 50 menos que el viernes pasado.

En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), las posiciones septiembre y noviembre de la soja perdieron US$ 7 y 7,80, mientras que sus ajustes fueron de 231 y de 235 dólares por tonelada.

Por tonelada de maíz disponible los exportadores ofrecieron $ 880 para Bahía Blanca, sin variantes. En cambios, el cereal para San Martín y para Necochea bajó su precio en $ 30, al cotizarse a 850 y a 840 pesos, respectivamente. En la BCR, el maíz de la próxima cosecha, con entrega en marzo, se negoció a US$ 118, con una merma de US$ 5 respecto del viernes.

En el Matba, las posiciones septiembre y abril del maíz perdieron US$ 3,40 y 4,70, en tanto que sus ajustes fueron de 101,50 y de 121,80.

Acerca del trigo, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires indicó que los molinos pagaron de $ 1000 a 1400, según calidad, procedencia y forma de pago. Los exportadores ofrecieron $ 950 por trigo condición cámara.

-14,2%

En picada

El maíz cayó desde los 171,15 dólares del 10 del actual a los 146,84 dólares de ayer.