La semana comenzó con mucha cautela y sin gran actividad en el mercado local de granos. La disposición a pagar de los exportadores de la región se movió a la baja en soja y con leves mejoras en el maíz.

En el mercado de Chicago los futuros agrícolas cerraron con saldo dispar. Los contratos de soja y maíz extendieron las ganancias del viernes ante el temor a un mayor deterioro de los cultivos norteamericanos. La firmeza de la demanda contribuyó con la tendencia positiva. En cambio, el trigo ajustó en baja, presionado por el avance de la trilla de invierno en los Estados Unidos y ante el fortalecimiento del dólar frente al resto de las monedas.

En la comercialización de la soja las fábricas de la zona de Rosario pusieron en duda la firmeza de la tendencia externa y salieron cautos a realizar negocios a la plaza, convalidando los mismos valores escuchados el viernes.

Según la Dirección de Informaciones y Estudios Económicos de la Bolsa de Comercio de Rosario, en el recinto de operaciones no se escucharon ofrecimientos concretos, aunque las fábricas por la tarde pagaban 2100 pesos por tonelada por pequeños lotes, igual cotización que la jornada del viernes.

La disposición a pagar mejoraba por lotes intermedios a grandes, acercándose al rango de 2120 a 2130 pesos por tonelada. En negocios diferidos hasta noviembre los precios se ubicaron en 242 dólares por tonelada, mejorando hasta 244 dólares en de diciembre, un dólar menos que el cierre anterior. Se intercambiaron unas 40.000 toneladas.

En el Rofex los futuros de soja condición fábrica con vencimiento en julio se ajustaron a 233 dólares, con 1110 toneladas operadas.

En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba) los ajustes para julio y noviembre cerraron esta vez con subas mucho más leves que la rueda precedente, esto es 1 y 0,20 centavos de dólar en cada posición al cotizarse, respectivamente, en 236 y 249,20 dólares por tonelada.

En Chicago los futuros de la oleaginosa se ajustaron en alza por cuarta rueda consecutiva, impulsados por la expectativa de recortes en la condición de cultivos en los Estados Unidos. Compras técnicas brindaron sostén adicional. Por otra parte, los contratos de aceite y harina se acoplaron a las ganancias del poroto.

Las pizarras indicaron 384,07 dólares por tonelada para julio, con una mejora de 65 centavos de dólar, y 377,91 dólares para noviembre, lo que significó una suba de 2,29 dólares por tonelada.

Diversidad de compradores

En tanto, la plaza del maíz contó con mayor diversidad de compradores, a precios que acompañaron las subas externas. Por cereal con descarga los valores comenzaron en 850 pesos por tonelada, aunque algunos exportadores convalidaron 870 pesos.

El grueso de los demandantes se orientó hacia la entrega en septiembre, pagando 900 pesos por tonelada sobre Timbúes y San Lorenzo. En esta posición de entrega también hubo negocios en el rango de 108 a 110 dólares por tonelada, cifra levemente superior a la del cierre anterior. Al final de la jornada se estimaron operaciones por 10.000 toneladas.

En el Matba, los ajustes para julio y septiembre fueron positivos en un 1 y en 3,50 dólares por tonelada, al cerrar en 103 y 113,50 dólares por tonelada.

En Chicago los futuros de maíz cerraron en alza y alcanzaron nuevos máximos en lo que va del año, impulsados por temores a una caída en la condición de cultivos en los Estados Unidos y tras la publicación del reporte de inspecciones de exportación del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) que arrojó cifras superiores a las esperadas, reflejando la notable firmeza de la demanda. Los operadores continuaron reaccionando a la proyección de menores stocks finales al finalizar la actual campaña.

En las pizarras, el contrato julio subió 2,46 dólares por tonelada, en tanto que para septiembre la mejora fue de 2,36 dólares, siendo sus cierres de 170,66 y 173,51 dólares por tonelada.

Respecto de la comercialización del trigo, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires informó que las fábricas ofrecieron en un rango que fue de los 1100 a 1700 pesos por tonelada, según el destino y calidad del cereal.

En el Matba el ajuste para enero fue de 137,50 dólares por tonelada, con una mejora de 1,50 dólar.

Los exportadores, en tanto, ofrecieron 156 dólares por tonelada en Bahía Blanca, sin descarga, con 10,5 por ciento de proteína y 78 de ph.

En Chicago los futuros de trigo cerraron nuevamente en baja, afectados por el rápido avance de la trilla en los últimos días y ante la débil demanda externa. El fortalecimiento del dólar resultó un factor bajista adicional. La posición septiembre quedó en 211,55 dólares por tonelada, registrando un leve descenso de 10 centavos de dólar. En Kansas, en tanto, el contrato septiembre quedó en 208,43 dólares, cediendo 1,84 dólares por tonelada.

Finalmente, por el girasol, una fábrica en San Jerónimo mantuvo sus ofrecimientos abiertos en 1850 pesos por tonelada con descarga inmediata. En tanto, otro comprador en Junín pagaba 1800 pesos por tonelada con entrega contractual.

Piden liberar el saldo exportable de maíz

El Centro de Corredores de Cereales de Rosario reclamó al Ministerio de Economía que libere el saldo exportable de maíz que, según el Ministerio de Agricultura, es de 18,5 millones de toneladas y así "dinamizar la comercialización que está injustamente obstaculizada".

En un comunicado, la entidad señaló que la situación del cultivo es de extrema gravedad, y que si no se revierte en lo inmediato repercutirá en la futura siembra "de forma alarmante".

El Centro de Corredores agregó que siempre se expresó "a favor del desarrollo de mercados libres y de la sana competencia entre oferta y demanda en pos de un precio justo".

Además, sostiene la entidad que el maíz se comercializa en la Argentina a 870 pesos por tonelada, precio de "oportunidad y de quebranto, no producto de un mercado".