Los precios de la soja y del maíz cerraron con saldo negativo ayer en la Bolsa de Chicago, producto del rápido avance de la siembra de granos gruesos del ciclo 2015/2016 en los Estados Unidos que, si bien sólo marca el inicio del ciclo agrícola, pasa a ser un potencial factor alcista menos, en un escenario de valores deprimidos y donde escasean las noticias alentadoras para las cotizaciones.
Al momento de fijar los ajustes de la rueda, las pizarras mostraron quitas de US$ 0,82 y de 1,10 sobre los contratos julio y agosto de la soja, cuyos precios resultaron de 357,89 y de 355,13 dólares por tonelada. De igual modo, la posición noviembre, que marca el ingreso de la nueva cosecha en el circuito comercial, perdió US$ 0,92 y terminó la jornada con un valor de 348,88 dólares.
Luego del cierre de las operaciones en Chicago, el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) confirmó la percepción del mercado en su informe semanal sobre el estado de los cultivos. En efecto, el organismo relevó el avance de la siembra de soja sobre el 31% del área prevista, por encima del 13% de la semana pasada; del 18% de 2014 para la misma fecha, y del 20% promedio de las últimas cuatro campañas. El dato oficial, además, superó el 28% previsto, en promedio, por los operadores.
Para la rueda de hoy, el mercado no sólo tendrá en cuenta el dato de la siembra estadounidense, sino también el informe de oferta y demanda de granos en el nivel mundial que el USDA publicará en plena rueda (de lo que se informa por separado).
En el mercado doméstico, una demanda bien abastecida por la soja que fue ingresando en el circuito comercial redujo ayer sus propuestas. La Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) informó que por mercadería con entrega inmediata las ofertas oscilaron de 1850 a 1870 pesos por tonelada, por debajo de los $ 1900 del viernes pasado. Sólo por grano sin descarga, las fábricas convalidaron $ 1900, mientras que los exportadores pagaron hasta $ 1920, contra los $ 1950 vigentes en la rueda anterior.
La atención de buena parte de los compradores sigue orientada a la soja para entregas diferidas. Por eso, el valor de la oleaginosa con descarga en julio para las terminales ubicadas en el Gran Rosario se mantuvo sin cambios, en 224 dólares, equivalentes a 1979 pesos. En Bahía Blanca y en Necochea, los precios también cerraron sin cambios, en 222 dólares.
En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), la posición mayo de la soja subió un dólar y cerró con un ajuste de 222,30 dólares por tonelada, en tanto que el contrato julio bajó US$ 0,50 y terminó la rueda con un valor de 226,60 dólares.
Maíz y trigo
El maíz estadounidense, que registra los valores más bajos desde principios de octubre último, volvió a caer ayer en Chicago. Los contratos julio y septiembre del cereal perdieron US$ 0,99 y 1,18, mientras que sus ajustes fueron de 141,92 y de 143,89 dólares por tonelada.
Al igual que en el caso de la soja, tras el cierre de las operaciones diarias el USDA confirmó el rápido progreso de la siembra de maíz. Según el organismo, ya se implantó el 75% del área prevista, por encima del 55% vigente un año atrás y del 57% promedio. Los operadores esperaban un avance sobre el 73% de la superficie prevista.
En el mercado local, los exportadores ofrecieron entre 950 y 970 pesos por maíz disponible para la zona de Rosario, sin variantes. En cambio, el cereal para entrega en julio se cotizó a US$ 111, con una baja de 2 dólares. En Bahía Blanca el grano grueso se mantuvo estable, en US$ 118.
Las posiciones julio y septiembre del maíz en el Matba perdieron US$ 1,50 y 0,50, en tanto que sus ajustes fueron de 112,50 y de 116,50 dólares.
Acerca del trigo, los exportadores pagaron $ 950 por cereal condición cámara en la BCR, sin cambios. El trigo con ph 78 y un mínimo de 10,5% de proteína se cotizó a $ 1200, mientras que con 11% de proteína lo hizo a $ 1395 en Bahía Blanca.
Reclamos y bloqueos
En medio de la puja salarial de los gremios vinculados con la agroindustria, tal el caso de los aceiteros que siguen con medidas de fuerza en las terminales de Ramallo, General Lagos y de Punta Alvear, ayer por la tarde la sede San Lorenzo de la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (Uocra) inició un plan de lucha por la paralización de las obras en la Termoeléctrica Vuelta de Obligado, que contemplará, desde la 0, bloqueos en las terminales de las principales firmas agroexportadoras que operan en el país.
"La medida comienza a partir de la medianoche y no se sabe cuándo termina", le dijo a Carlos Vergara, secretario general de la Uocra San Lorenzo a la agencia Reuters. El dirigente agregó que hay unos 1300 obreros de la construcción afectados por la paralización de la obras.
"En este momento estamos preocupados por los camiones que están en viaje, ya que con el paro de los aceiteros en la zona sur del Gran Rosario, si cortan accesos en los puertos del Norte, no habrá hacia donde desviarlos", contó a LA NACION una fuente del sector comercial, al cierre de esta edición.
Expectativa por el nuevo reporte del USDA
El Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) publicará hoy su nuevo informe mensual de oferta y demanda de granos en el nivel mundial. La expectativa del mercado esta centrada en esta ocasión sobre las existencias finales estadounidenses 2014/2015 y sobre las primeras cifras que el organismo proyecte para la campaña 2015/2016.
Como sucede antes de cada informe oficial, los operadores anticiparon sus propias cifras. Acerca de la soja, el promedio de las estimaciones privadas ubicó el stock final 2014/15 de EE.UU. en 9,80 millones de toneladas, por debajo de los 10,06 mill./t del reporte de abril. En cuanto a la nueva cosecha, la proyectaron en 104,21 mill./t, contra los 108 millones precedentes.
Respecto del maíz, los privados estimaron el stock final en 47,35 mill./t, por encima de los 46,42 millones del mes pasado, mientras que la próxima cosecha estadounidense la calcularon en 344,95 mill./t, por debajo de los 361,09 millones 2014/2015.