En los últimos días se habló mucho de las retenciones, a raíz del plan que presentó el Gobierno para devolver parte de ellas a los productores que cosechen hasta 700 toneladas de granos al año.
El tema puso a pensar a algunos corredores de granos, siempre amigos de las planillas de Excel, que comenzaron a hacer cuentas e imaginar qué hubiera pasado si se hubiera aprobado en 2008 la Resolución 125 y hoy estuvieran en vigencia las retenciones móviles para la soja que esa norma establecía.
Para estas cuentas, los corredores tomaron los precios de la soja en dos momentos de cada año, desde el 2008 hasta ahora. El primer momento es junio, con la cosecha sudamericana finalizada, y el segundo es noviembre, cuando llega a su fin la trilla en Estados Unidos.
Considerando los valores de esos momentos en cada año hasta el actual, la tabla que se hubiera aprobado de las retenciones móviles indicó que en 3 fechas los derechos de exportación hubieran sido menores a los actuales de 35%, en 5 fechas hubieran estado levemente arriba del 35% y en 10 fechas se hubieran ubicado muy por arriba del 35% (con un promedio de estas últimas fechas de 43%).
Con los valores actuales de la soja, muy deprimidos, las retenciones serían menores al 35%, pero a lo largo de todos estos años, desde el 2008, los productores hubieran dejado en el fisco mucho más dinero aún del que dejaron.