La favorable evolución de las ventas externas estadounidenses y las dudas en torno del número final de la cosecha de Brasil posibilitaron ayer que la soja se negociara en alza por tercera rueda consecutiva en la Bolsa de Chicago y que completara la segunda semana seguida con saldo positivo.

Al termino de las operaciones, las pizarras del mercado mostraron alzas de US$ 2,48 y de 2,94 sobre los contratos marzo y mayo de la soja, cuyos ajustes resultaron de 363,95 y de 365,51 dólares por tonelada. En el balance de la semana, estas posiciones subieron un 1,75 y un 1,51% frente a los valores vigentes el viernes pasado, de 357,70 y de 360,09 dólares.

Tras el favorable reporte de ventas semanales publicado anteayer por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, en el que relevó ventas de soja por 746.200 toneladas, contra un rango previsto por el mercado de 250.000 a 450.000 toneladas, ayer el organismo confirmó una nueva venta de la oleaginosa estadounidense a China, por 110.000 toneladas.

En cuanto a Brasil, según un relevamiento de la agencia Reuters entre 17 estimaciones de organismo y de firmas privadas, la cosecha brasileña de soja resultaría de 93,40 millones de toneladas, un volumen que, pese a los recortes impuestos por el clima seco que afectó particularmente a la región centro-oeste del país, sería récord, al superar los 86,12 millones del ciclo 2013/2014.

En el mercado doméstico se volvió a incrementar ayer el volumen de soja vendida que, según la Bolsa de Comercio de Rosario, pasó de 50.000 a 80.000 toneladas. Si bien para la oleaginosa disponible las fábricas mantuvieron estables sus propuestas, que según los acuerdos particulares en cuanto a volumen y a entrega oscilaron de 2350 a 2400 pesos por tonelada para las terminales próximas a Rosario, hubo mejoras para las entregas durante el mes próximo. En efecto, por soja con descarga durante la primera quincena del mes los compradores pagaron hasta US$ 260, un valor que implicó subas de entre 5 y 10 dólares.

Esta mejora amplió aún más la brecha existente entre los precios de la soja con entregas cercanas y las cotizaciones asignadas a la mercadería con descargas posteriores a la segunda quincena del mes próximo. En efecto, por soja para la segunda quincena de marzo la demanda mantuvo su oferta de US$ 235, en tanto que por grano para abril propuso US$ 232.

En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), la posición febrero de la soja se mantuvo estable, con un ajuste de 274 dólares por tonelada, mientras que el contrato mayo subió US$ 1,50 y terminó la rueda con un valor de 237 dólares.

Luego de tres ruedas bajistas consecutivas, en Chicago los contratos marzo y mayo del maíz sumaron US$ 1,67 y terminaron la jornada con ajustes de 152,45 y de 155,60 dólares por tonelada. En el balance de la semana, estas posiciones subieron un 0,39 y un 0,32% frente a los valores vigentes el viernes pasado, de 151,86 y de 155,11 dólares.

En la plaza local, los exportadores volvieron a ofrecer $ 1100 por tonelada de maíz disponible para Bahía Blanca, sin cambios, mientras que pasar San Lorenzo propusieron $ 960 para el cereal con entrega hasta el 15 del mes próximo, $ 20 menos que anteayer.

El cereal de la nueva cosecha se mantuvo estable, dado que los interesados ofrecieron US$ 135 para Bahía Blanca; US$ 130 para Necochea, y US$ 120 para San Martín. En el Matba, la posición abril del maíz bajó US$ 0,50 y cerró con un ajuste de 124 dólares por tonelada, en tanto que el contrato julio se mantuvo estable, con un valor de 125 dólares.

Respecto del trigo, la posición marzo en Chicago y en Kansas aumentó US$ 4,31 y 3,22, mientras que su ajuste fue de 195,84 y de 206,78 dólares.

La Bolsa de Cereales de Buenos Aires indicó que los molinos mantuvieron sus propuestas de $ 1070 a 1450 por tonelada de trigo, según calidad, procedencia y forma de pago. En el Matba, las posiciones marzo y julio bajaron US$ 4,20 y cerraron la rueda con ajustes de US$ 122 y de 140.

El estado de los cultivos locales, cerca del ideal

En su reporte semanal sobre los cultivos de la zona núcleo, la Guía Estratégica para el Agro de la Bolsa de Comercio de Rosario señaló que el calor pasó casi inadvertido por los cultivos ante la adecuada humedad que presenta la región. "La soja de primera pretende batir récords de rindes y superar en 5 quintales el promedio histórico zonal, de 35 quintales por hectárea. Las plagas están en niveles controlables y las lluvias dibujan el escenario para una abundante cosecha."

Acerca del maíz, los sembrados en diciembre están por ingresar en el periodo de definición de número de granos. "La condición del cultivo indicaría otro éxito de esta siembra, al igual que en el ciclo pasado. El maíz tradicional está finalizando su ciclo con pronósticos de rindes un 15% por encima del promedio zonal, de 90 quintales."