Son los artesanos de la ganadería. Son los que para producir un ternero, criarlo y seleccionarlo para llegar al mejor toro de un rodeo comercial demuestran "ojo, muñeca y habilidad". Son ellos, los cabañeros, asesores y personal de campo los artífices de estos specialities de la ganadería y que todos los años vienen a la Exposición Rural de Palermo a mostrar el resultado de su esfuerzo y dedicación.

Un resultado que a veces se premia con precios que pueden trepar a lo increíble, aunque en un escenario en el que los márgenes de utilidad son ajustados. Así, por ejemplo, algunos estiman que los costos pueden oscilar entre $ 14.000 y $ 25.000 o más.

"Un toro para rodeo comercial llega al mercado con dos a tres años de vida, que, sumados a los nueve meses de gestación y a los tres meses de la temporada de servicio de su madre, hacen que el producto que se pone a la venta conlleve una inversión de tres a cuatro años. Muchísimo esfuerzo y dinero invertido en cada reproductor", dijo a LA NACION el ingeniero Jorge Sedelli, gerente de Cabañas La Paz y Los Guasunchos de Werthein SA.

Los costos para producir un toro de campo pueden variar según la región, el sistema de crianza y el mercado donde se aspire a venderlo. "Podemos estimar que van desde los $ 14.000 hasta los $ 25.000 o más. Y si consideramos que puede ser fruto de un embrión comprado, incluso importado, los valores son aún más altos", dijo.

Según este asesor, el costo de alimentación es uno de los principales, pues además del costo directo de las pasturas, granos y subproductos que debe utilizar para garantizar una recría y preparación correctas, está el costo financiero de los insumos adquiridos . El costo veterinario, en tanto, se aplica en forma sistemática a toda la producción año tras año.

"Los toros son dentro de la ganadería lo que llamamos un speciality. Ésta es la razón por la que hay toros que valen $ 20.000, otros $ 50.000 y otros, los menos, $ 600.000", dijo el asesor y explicó que tanta diferencia entre los valores es porque el destino de los toros no será semejante: algunos terminarán en centros de inseminación artificial, otros irán a otras cabañas como padres de nuevas generaciones de toros y, finalmente, los restantes terminarán dando servicio en rodeos comerciales para la producción de terneros generales, los futuros novillos para faena."

Composición del costo

Para el propietario de la cabaña La Sultana, Mauricio Groppo, los costos directos para la producción de un reproductor macho que llegue a la venta con 2 años de edad y 680 kilogramos de peso ronda entre los 15.000 y 17.000 pesos, según el grado de confinamiento que tenga entre el destete y la venta.

Explicó que este costo está compuesto por la producción del ternero (con entre el 35 y 45 por ciento de participación), la alimentación (40-45%), la sanidad (5%) y la mano de obra (10-15%), dependiendo éstos de los precios de la carne y de los insumos en cuestión. A esto hay que sumarle los gastos de estructura (impuestos, mantenimiento de maquinarias e instalaciones, movilidades, retiros, etcétera), los cuales varían según las características de cada empresa.

A la hora de vender, sostiene el cabañero que una relación habitual para valorizar un toro para un rodeo comercial es de 3 novillos de 400 kilos (1200 kg a $ 17, lo que es igual a $ 20.400), aunque advirtió que los márgenes de la actividad hoy están muy ajustados.

Groppo agregó que hay distintas formas de comercializar un reproductor. "Lo más normal es en remates especiales de cabañas o exposiciones, o en forma directa del productor de genética al criador; en estos casos se suele utilizar el canje por terneros, en los que no hay gastos de comercialización. Lo habitual es que haya algún costo (de 3 y 18% sobre el valor de venta), según sea una venta directa en la que interviene un comisionista. Una posición intermedia son las ventas en remates, y las más costosas, sin duda, son las exposiciones", agregó.

El ingeniero Estanislao Quiroga, asesor de la cabaña Don Federico, separa las actividades de la cabaña para llegar luego al costo final de producción. "La cría de reproductores no difiere mucho en el aspecto técnico de la cría comercial y para el cálculo de costos consideramos la alimentación, la sanidad, la mano de obra y la genética. Para completar el análisis, le sumamos la reposición de vientres y toros y arrendamientos que, si bien son provistos por la empresa, debemos considerar", señaló el profesional.

"Así, con valores actuales, el costo de un ternero producido con nuestro sistema de cría es de 3362 pesos por cabeza; los principales costos son el arrendamiento y la reposición de vaquillonas", agregó.

Explicó el profesional que luego el ternero destetado es recriado desde los 180-200 kilos a los 400 kilos en un período de 12 a 15 meses. "La base forrajera es pasturas y promociones de raigrás apoyadas con suplementación de grano de maíz y silajes de maíz de autoconsumo. El costo de esta recría es de 1291 pesos por cabeza y los principales costos son arrendamientos y alimentación", dijo.

Agregó Quiroga que terminada esta etapa comienza la preparación del toro para llevarlo a 600 kilos y transformarlo en un reproductor listo para servicio. "La base forrajera de esta etapa es básicamente la misma, pero apoyada con un poco más de suplementación. Este período tiene un costo de 3172 pesos por cabeza. La mayor parte se lo lleva la alimentación, pero ya comienza a pesar el rubro de asociaciones y registros, representando aproximadamente el 15% del costo de esta etapa. Al finalizar la misma ya contamos con un reproductor comercial listo para ser vendido y salir a trabajar al campo. Hasta este momento, el costo total por cabeza suma 7826 pesos y llevó 31-36 meses."

Agregó el asesor que no todos los animales que comienzan el proceso llegan a ser reproductores vendibles, entre el destete y la preparación al menos un 50% de los animales quedan en el camino. "Ya con este factor el costo de cada toro queda en 8758 pesos por cabeza", concluyó.