Scioli enviará el proyecto al Poder Legislativo la próxima semana, tras las elecciones. De acuerdo con los datos preliminares, estará centrado en un pedido urgente de fondos para la gestión mínima del Estado y el pago de sueldos. Entre otros aumentos, se vislumbra uno de un promedio del 18% en el impuesto inmobiliario rural, según publica Perfil.

Fuentes oficiales aseguran que no se trata de una suba sino de una “actualización” del valor de las propiedades del 15 al 20%, que en la ponderación final redundará en un aumento medio del 18% en el impuesto. Si bien la alícuota no será modificada, los contribuyentes pagarán más en 2014. Se trata de una cifra cercana a la inflación real de la economía.

La Legislatura deberá analizar si este aumento será parejo para todo el territorio. Lo que se descuenta es que en algunos distritos del sur provincial, afectados por la sequía, el esquema tributario estará alivianado.

Por su parte, la oposición parlamentaria ya opinó que la suba “no estaría justificada”, ya que el “impuestazo” de fines de 2012, que fue cercano al 50% para 2013, ya contemplaría al próximo año, de acuerdo con el cálculo inflacionario del 25% anual.