Llegada esta época del año, en Chubut se inicia una tarea dentro del sector ganadero que tiene sus propias características: la esquila del ganado ovino. Tanto capataces como agarradores, playeros, prenseros y embolsadores, están expuestos en sus puestos de trabajo a varios riesgos y deben conocer los mismos para prevenir posibles complicaciones a producirse durante o después de sus actividades.
Así, la Dirección General de Seguridad e Higiene y Riesgos del Trabajo de la Secretaría de Trabajo alerta sobre los principales riesgos que son las condiciones climáticas, debido a las bajas temperaturas de la zona; los riesgos eléctricos, ya que se utilizan maquinarias que funcionan eléctricamente; riesgos ergonómicos, debido a la interacción con animales a los que hay que dominar, por lo cual se exponen a posiciones forzadas y/o realizar movimientos que se repiten constantemente; riesgos biológicos, teniendo en cuenta que los animales pueden adquirir enfermedades que contagian a los humanos; y riesgos químicos, ya que los productos que se utilizan en la limpieza de los animales pueden perjudicar a los trabajadores.
Medidas Preventivas
Teniendo en cuenta la variedad de riesgos a los cuales están expuestos, la Secretaría de Trabajo recomienda utilizar ropa adecuada a la estacionalidad, la cual no debe tener accesorios metálicos que puedan ser causales de accidentes con la electricidad; utilizar elementos de protección personal adecuados; asegurarse del mantenimiento de las instalaciones eléctricas y que todos los trabajadores sepan cómo se desconecta la corriente eléctrica, deben haber controles periódicos respecto del sistema eléctrico e instalar fusibles o interruptores automáticos de adecuada intensidad para proteger las instalaciones y sobre todo a los trabajadores que utilizan las maquinarias alimentadas por electricidad. Además, la capacitación a los trabajadores respecto de los riesgos específicos de su tarea, es prioritaria.
Enfermedades profesionales
Los animales padecen enfermedades que pueden ser transmitidas a los trabajadores de la esquila, por lo tanto se debe tener un control adecuado de la salud de los animales y bregar por la prevención.
Carbunco es una de las posibles enfermedades, se adquiere por vía cutánea, digestiva y/o respiratoria. La forma de prevenirla es mediante la vacunación del ganado y su control; por incineración de cadáveres de animales, principalmente si se desconoce la causa de muerte; o bien enterrando los cadáveres a no menos de 1,50 metros de profundidad, con la aplicación de un baño previo de lechada de cal.
Brucelosis es otra de las enfermedades a las que están expuestos los trabajadores, se adquiere por inhalación y/o contacto. Es una de las principales zoonosis que afectan a nuestro país y representa muchos de los casos de muerte; cabe destacar que una vez adquirida, el hombre puede sufrirla el resto de su vida.
Para cumplir con la legislación vigente, estos trabajadores deben estar registrados ante una ART para que lo cubran ante un accidente de trabajo o una enfermedad adquirida en el trabajo.