Los productores insisten en el argumento de que dicho gravamen solo beneficiará a las multinacionales.
Ramón Sánchez, presidente de la UGP, comentó que no se pueden exportar impuestos y favorecer a las aceiteras con la devolución del IVA del 5%, mientras que no habrá devolución para los productores que exporten granos en estado natural. Comentó estar en desacuerdo con la postura de la Cámara Paraguaya de Procesadores y Exportadores de Oleaginosas y Cereales (Cappro) porque solo ella quiere tener la devolución del IVA.
“Los dos somos exportadores de materia prima. Uno de aceite y otro de granos. A uno se le devuelve el 5% del IVA y al otro no. Debe ser para todos por igual”, dijo Sánchez.
Señaló que el aceite en bruto también es un commoditie, al igual que el grano de soja.
“Los de Cappro, hoy sin ley, pueden procesar hasta el 60% de la soja. Al exportar el producto, quiere que se le devuelva el IVA por el 60% de lo exportado y no quieren que se les devuelva a los que exportan granos. Es un impuesto a la exportación encubierto como IVA. Subsidio directo al exportador de aceite”, disparó.
En una zafra normal, si es 10% de este impuesto significa USD 270 millones para el bolsillo de las multinacionales, si es el 5% son USD 135 millones, según el productor. “ No estamos de acuerdo en pagar un impuesto que vaya a las multinacionales. Queremos el 100% para el fisco”, afirmó Sánchez.
NO ES FAVERO. Carlos Pereira, vicepresidente segundo de la ARP, dijo que no solo afecta a la soja, ya que el productor hace otras actividades.
Señaló que, de aprobarse el impuesto, para poder sostener el cultivo de soja se perderán los cultivos de maíz, trigo, girasol y hasta la ganadería.
“Creen que esto es solo la soja. Ninguno de estos productores es Favero. Es un concepto mal parido este impuesto. Hay que fomentar la industrialización, pero no a costa del productor”, puntualizó.
El diputado Ortiz, a su vez, dijo que ahora se hará un dictamen, pero se mostró favorable al rechazo de este impuesto, para lo que se necesitan 53 votos.
Ya en horas de la noche, diputados colorados se reunieron con el vicepresidente electo, Juan Afara, para hablar del impuesto, aunque la bancada colorada no tomó una postura oficial.