Durante la semana las labores de recolección de la soja se vieron interrumpidas momentáneamente por lloviznas de variada intensidad, que no impedirán retomar las labores normalmente. La trilla de soja de primera se realiza sobre los lotes de siembras tempranas. Estos cultivos, en general resultaron favorecidos en esta campaña, escapando al pulso seco que se intensificó a mediados de enero y persistió durante febrero. Deberá esperarse para conocer con certeza la condición de los lotes de siembras intermedias. Los cultivos de segunda están apurando la finalización de su ciclo, debido al clima de bajas temperaturas imperantes, sin limitantes hídricas importantes, con un promedio esperado que estará en torno a los 27 qq/ha. Estos rindes estarán sujetos a la evolución de las temperaturas que, hasta el momento, al estar por debajo de los valores normales, han afectado la tasa de crecimiento de los cultivos, pero sin llegar a producirse daños de gravedad al no haberse registrado heladas.
En el caso del maíz de primera, el avance de cosecha es del 46%, y siguen siendo buenos los rendimientos obtenidos, con una media que se ajusta en 91 qq/ha. Para los maíces de segunda las expectativas de rinde promedio son del orden de los 70 qq/ha, con la atención puesta en la ocurrencia de heladas tempranas. Las condiciones de humedad relativa, de mantenerse en valores elevados favorecidos por las bajas temperaturas, podrían complicar la obtención de grano seco al momento de cosecha.
Finalmente, de cara a la próxima campaña fina, aun no se define la intención de siembra de trigo, ya que la atención se centra principalmente en la actual recolección, pero se evalúan los precios futuros como indicadores de la viabilidad del cultivo, la fluidez o restricciones a la comercialización, y la necesidad financiera de algunos productores que podrían optar por trigo para obtener ingresos antes de la próxima cosecha gruesa.
Reserva de agua útil para pradera permanente al 21/03/2013