Tres días después de que fuera denunciado por la agresión a un militante del PRO el sábado, en Vicente López, y en el mismo día en que quedaba formalmente imputado en una causa penal, el polémico secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, fue defendido ayer por la presidenta Cristina Kirchner.
Ocurrió al mediodía, durante un encuentro con la dirigencia de la Confederación Inercooperativa Agropecuaria (Coninagro). “Moreno es una persona honesta. Como funcionario cumple con sus funciones”, expresó la Presidenta a los dirigentes de Coninagro cuando éstos le exponían sobre la distorsión en el mercado del trigo y las trabas que pone el secretario de Comercio, y ella salió en defensa de las políticas llevadas a cabo por el Gobierno, según dijeron fuentes de la entidad.
Por esas horas, Moreno ya había quedado formalmente imputado en una causa tramitada por una fiscalía del Ministerio Público porteño a raíz de la agresión sufrida por el militante de PRO Marcelo Urcelay el sábado en el barrio de Núñez. Urcelay, coordinador de Logística de la campaña de Jorge Macri para la intendencia de Vicente López, vecina al barrio porteño de Núñez y ocupada actualmente por un aliado kirchnerista que va por la reelección, el radical Enrique “Japonés” García. Macri ganó en la primaria por pocos votos. Y este domingo se define.
El ataque mereció ayer nuevos repudios de parte de dirigentes de la oposición, proyectos de ley para citarlo al Congreso y hasta pedidos de renuncia del funcionario conocido por otros actos similares de agresiones y violencia. La acusación contra Moreno es por los delitos de lesiones en riña y daños, transferidos de la órbita nacional a la Justicia porteña.
La denuncia fue hecha por el propio Urcelay el sábado en la comisaría 35 del barrio de Núñez y tomó intervención la fiscal de turno, Verónica Andrade. Ayer la denuncia fue sorteada y recayó en la fiscal Mariela De Minicis, del equipo D de la Fiscalía Norte del Ministerio Público porteño. Moreno es la única persona a la que pudo identificar Urcelay entre sus agresores.
El ataque se produjo el sábado, cuando el militante de PRO se dirigía en auto a Vicente López y se detuvo en la esquina de la avenida Cabildo y la calle Ramallo para repartir boletas y folletos entre los vecinos. En esa esquina, Moreno había inaugurado días atrás la unidad básica Pueblo Peronista.
“Apareció Moreno, me agarró del cogote , me tiró contra un auto, puteándome, diciéndome que me vaya”, dijo el denunciante el domingo. “Me empezaron a pegar piñas, patadas. Hasta que me pude escapar”, agregó sobre otras personas que acompañaban al secretario de Comercio. De acuerdo con fuentes judiciales, eran más de una decena .
La Justicia ya tiene en su poder la camiseta ensangrentada y rasgada que vestía Urcelay ese día. Además, se tomaron fotografías del auto golpeado por una de las personas que acompañaba al funcionario del Gobierno nacional. Ayer comenzaron a buscarse testigos de los hechos.
La fiscal pidió a la Policía Metropolitana las imágenes captadas ese día por la cámara de seguridad ubicada precisamente en esa esquina de Núñez. Además, solicitó videos a los canales de televisión (en realidad fueron imágenes tomadas con teléfonos celulares) y constató las lesiones de la víctima.
Las fotos fueron tomadas por testigos y dos de ellas fueron publicadas por Clarín en su edición de ayer. En ambas se ve a Moreno, de camisa amarilla y pantalón negro, curiosamente los mismos colores del PRO que llevaba pintados el auto de Urcelay. El vehículo también tenía la imagen del primo del jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri.