El citado trabajo es efectuado en el marco del “Programa de Inserción Agrícola” - Apoyo a los procesos de apertura e integración al comercio internacional desarrollado por Confederaciones Rurales Argentinas, Fundación INAI, Centro de la Industria Lechera, y Sociedad Rural Argentina, en forma conjunta con el Banco Interamericano de Desarrollo - Fondo Multilateral de Inversiones con el objetivo de facilitar una mayor inserción económica de los países del MERCOSUR en el resto del mundo.
La Huella de Carbono como Nuevo Estándar Ambiental en el Comercio Internacional de Agroalimentos
La evidente interrelación entre el comercio y la protección del ambiente ha hecho surgir en los últimos años el negocio sustentable como nuevo imperativo estratégico y de futuro muy próximo a escala mundial. En este contexto es que surge el informe sobre “La huella de carbono como nuevo estándar ambiental en el comercio internacional de agroalimentos”. Este nuevo indicador, que para el caso de los agroalimentos pretende cuantificar la cantidad de emisiones de Gases Efecto Invernadero (GEI), tanto directas como indirectas, medidas en emisiones de CO2 equivalente, que son liberadas a la atmósfera en el ciclo completo de los agroalimentos (desde la adquisición de las materias primas hasta su gestión como residuo), se ha ido implementando en los últimos años en diversos mercados.
En consecuencia, el objetivo principal de este documento es, sobre la base del análisis del contexto internacional, las normativas y propuestas multilaterales, regionales y nacionales relativas a la implementación de estándares de huella de carbono en productos alimenticios, evaluar el posicionamiento de la Argentina, tanto en la esfera pública como en el ámbito privado.
En primer lugar partiendo de un análisis legal de los etiquetados verdes o ecológicos dentro del cuerpo normativo de la Organización Mundial del Comercio (OMC) en su interrelación con los Acuerdos Multilaterales del Medio Ambiente (AMUMA), se ha realizado un relevamiento de las diferentes iniciativas que los mayores demandantes de alimentos argentinos y regionales, la UE y los EE.UU., vienen implementando en los últimos años. En este sentido es de destacar el marcado avance en etiquetados de huella de carbono en países como Francia (Leyes Grenelle I y II/art.85), el Reino Unido (Estándar PAS 2050 DEFRA-BIS) y Suecia. Todos programas oficiales aún no obligatorios pero que ya han sido adoptados por las principales cadenas de supermercados (Tesco y Casino) como estándares privados. En este mismo sentido, tanto en EE.UU. como en Europa se vienen desarrollando importantes campañas para consumir productos locales por sobre los productos importados que recorren largas distancias para llegar a las góndolas, por su baja emisión comparada.
En una segunda instancia, en función de la evolución observada en los mercados demandantes, se analizaron las acciones llevadas a cabo por Argentina y Brasil, como países oferentes competidores. Brasil ha avanzado en un Inventario Corporativo de Gases Efecto Invernadero, y desde el sector privado ha lanzado diferentes acciones como la “Alianza Brasilera por el Clima”, el “Índice de Sustentabilidad Empresarial” y la “Iniciativa Pro Alimentos Sustentables”, con el objetivo de hacer más sustentable la producción de alimentos y no verse perjudicado en la demanda externa con mayores exigencias ambientales. La Argentina, por su parte, se encuentra en un estadio inicial, con programas muy valiosos como el Agroecoindex del INTA o el Subprograma de Producción Limpia de la Secretaría de Ambiente, pero aún no existen en el país programas de medición de huella de carbono de ciclo completo en agroalimentos.
Sobre estos resultados obtenidos, el informe actualmente en su etapa final de elaboración, concluye con propuestas y sugerencias de acciones tanto para el sector privado como público, con el objetivo final de aportar informaciones útiles para enfrentar las discusiones internacionales que empiezan a surgir tanto en el ámbito multilateral como bilateral, así como en materia de estándares privados de cadenas minoristas e importadores. Dentro del delicado equilibrio entre la protección del ambiente, el desarrollo sustentable y la seguridad alimentaria, la Argentina, como país en desarrollo proveedor de alimentos debe avanzar en una actitud proactiva. La huella de carbono como tema estratégico plantea desafíos y oportunidades. Por lo tanto, urge la necesidad de pensar los negocios con perspectiva de futuro y en sintonía con el ‘nuevo mundo ambientalista’.