"Hasta que el ministro de Agricultura (por Julián Domínguez) no se dé cuenta lo que han armado entre la exportación y la molinería, el problema no tiene solución", indicó Cameron a Infocampo.com.ar, para luego mencionar que "éste es el peor momento en años de intervención" (no es por cierto el único que opina lo mismo).
"Creo que Domínguez quiere solucionar la crisis presente en el sector, pero no sabe cómo porque es político y no tiene experiencia técnica", apuntó el presidente de Aaprotrigo. "Los que sí saben cómo arreglarlo, pero no quieren, son la exportación y la molinería", agregó.
Si bien la falta de demanda de trigo es notoria en todo el país, en la región sudeste de la provincia de Buenos Aires (la principal zona triguera del país) el problema es aún mayor, dado que no se encuentran, ni siquiera, molinos que puedan adquirir el producto.
"Si alguien necesita vender y encuentra un molino que se lo compre, que lo haga; de lo contrario, tal como sucede en la zona de Necochea, el productor está en una situación muy complicada y nunca antes vista", alertó.
Uno de los aspectos que genera mayor polémica es que los precios ofrecidos por los molinos locales son similares al FAS teórico oficial publicado por el Ministerio de Agricultura, aunque tales ofertas no son tales porque en las mismas se aplica un descuento en concepto de "flete".
"En los últimos meses la situación del mercado se ha agravado porque el gobierno nacional le ha dicho a la molinería que no salga a competir, garantizándole el trigo", señaló el entrevistado, y añadió que "un mercado tan intervenido prácticamente no tiene solución".