Claramente esto se verá reflejado en los rindes de trigo del sudeste de Buenos Aires. Azul, Tandil, Ayacucho, han contado en todo el ciclo con mejores reservas que sus vecinos del sur. Incluso hay zonas de Balcarce, Lobería y Necochea donde las perspectivas de rendimiento no son para nada alentadoras.

Al fijar el análisis sobre la franja oeste, se nota una normalización de las reservas en una importante zona del centro de Córdoba, aunque una mirada completa de la franja mediterránea todavía presenta extendidas zonas que no han logrado recuperar totalmente la humedad del perfil del suelo. No obstante esto, es evidente que las lluvias han cambiado la condición de humedad superficial en gran parte de la zona agrícola de Córdoba y el norte de La Pampa, lo que permite las siembras de soja que todavía se están realizando. Para las zonas menos provistas será clave la continuidad que muestren las lluvias en Diciembre, esto es también válido para San Luis y zonas del centro oeste de Buenos Aires. La cosecha de trigo que ha empezado en el nordeste de la región pampeana indica buenos resultados aunque se ha visto entorpecida por los excesos de agua registrados principalmente en Entre Ríos. Naturalmente debido a la inclemente sequía registrada en períodos anteriores los rendimientos bajan hacia el oeste para hacerse pobres en el centro-oeste de Córdoba y La Pampa.

El maíz presentaba un buen panorama, estando ya los más adelantados del nordeste de la región Pampeana en estado de floración, los del oeste también evolucionan favorablemente y aunque el perfil no está del todo recargado, la humedad alcanza para estos primeros estadios del cultivo.

Se continuaba con la siembra de soja de primera estando bastante avanzada esta actividad. En general las perspectivas eran buenas y como en el caso del maíz len el oeste la humedad superficial era suficiente para este cultivo que aún consume poco agua. La superficie destinada al cultivo era mayor que el año pasado.

En cambio el girasol presentaba una menor superficie de implantación no obstante sus perspectivas eran buenas aunque en el sudoeste de Buenos Aires se esperaba una floración con alturas inferiores a las normales debido al stress hídrico.

En Chaco el avance de la siembra de algodón se ve nuevamente retrasada por motivos extremos: mientras que en el noroeste la falta de lluvias sigue siendo un problema sin solución, en el resto de la provincia las continuas precipitaciones de la última semana están postergando la implantación por falta de piso. Esta situación se esta revirtiendo en las ultimas jornadas.

La oferta forrajera estaba era muy buena en el este de la región pampeana empeorando hacia el oeste aunque con mejoras ostensibles en el último mes. Se había iniciado la siembra de verdeos de verano. En el sur de La Pampa todavía la situación era comprometida.

  • Por CCA - exclusivo para Agrositio.com

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