A partir de entonces, lo hizo crecer exponencialmente, llevando de 15 mil a 700.000 la cantidad de trabajadores aportantes.
Periodista: Recientemente hubo ataques del Gobierno por la falta de blanqueo de trabajadores rurales. ¿Qué hay de mito y qué de verdad en estas acusaciones?
Gerónimo Venegas: Estos ataques son por las diferencias que tiene el Gobierno con el sector agropecuario. Hablan de trabajo en negro, pero no se puede registrar sin Policía de Trabajo (que depende directamente del Ministerio de Trabajo de la Nación). El Estado tiene la mayor responsabilidad de que no haya trabajo en negro, ni trabajo infantil, ni mano de obra indocumentada. No sólo a nivel nacional sino de las provincias.
P.: ¿Cuántos trabajadohay en el campo?
G.V.: Debe haber un millón y medio. Nosotros teníamos 770.000, pero en los últimos tiempos bajaron a 700 mil, porque no hay producción. Por ejemplo, en el manipuleo y almacenamiento de granos, donde tenemos mucha mano de obra, el trabajo se ha parado. No se produce y en consecuencia no se mueve cereal. Si no se bajan las retenciones al trigo, al maíz y al girasol, caerá más la producción, especialmente lo que llamamos cosecha gruesa. No hay rentabilidad.
P.: Hace dos años se hablaba de superar los 100 millones de toneladas de granos y ahora serían 70 millones.
G.V.: ¡Ojalá fueran 70 millones de toneladas! ¡Serán muchas menos! Prácticamente no hay trigo. La sequía y el aumento de los insumos han hecho muy difícil sembrar. Si no bajan las retenciones, va a ser muy difícil sembrar maíz y girasol.
P.: UATRE tiene oficinas regionales. ¿Cuáles son las zonas más afectadas por la crisis del campo?
G.V.: Las economías regionales están sufriendo las consecuencias de este enfrentamiento entre el campo y el Gobierno. El campo es el impulsor, el motor de la economía. No tiene sentido que sigan enfrentados, porque si no se produce, no ingresan divisas.
P.: ¿La relación de UATRE con las entidades que forman la Mesa de Enlace ha empeorado o mejorado a través del conflicto?
G.V.: Por momentos tenemos algunos roces, porque no hay una relación de enamoramiento. Incluso, hemos tenido unos problemas recientemente, porque no querían tomar mano de obra de la UATRE para hacer el paleo de los silos de bolsa. Ha habido algunos enfrentamientos, pero hay que reconocer que si no hay producción, no hay fuentes de trabajo.
P.: ¿Como dirigente gremial qué le preocupa de este conflicto?
G.V.: Me preocupa que siga este enfrentamiento, una pelea innecesaria; que se siga culpando al campo cuando aquí el único que puede resolver esto es el Estado nacional.
P.: Usted siempre menciona al trabajo infantil como otro flagelo del sector. ¿Qué hacen para combatirlo?
G.V.: Hacemos relevamientos, pero cuando hay un campo que produce y tiene rentabilidad. Hemos tenido enfrentamientos con los productores, que nos han cortado las gomas de las camionetas que van a hacer las inspecciones, por ejemplo, en explotaciones de ajos, en San Juan. Esto pasó hace dos meses.
P.: ¿Es buena la relación de UATRE con el Gobierno?
G.V.: (Sonríe) No, nada buena. Yo fui el que los enfrentó en las elecciones recientes y les ganamos las elecciones.
P.: ¿Usted siente que hay más presión sobre el trabajador rural luego de las elecciones?
G.V.: Total. Todo lo que dicen del trabajo en negro en el campo, se dice porque uno sigue defendiendo la producción y el trabajo.
P.: Pero temas como el de los silos, que comentó, complican la relación con las entidades rurales.
G.V.: No, eso ya está solucionado; es un tema menor.
P.: ¿No es como dicen algunos, que usted es la quinta pata de la Mesa de Enlace?
G.V.: No, de ninguna manera. No soy pata de ninguna Mesa de Enlace. Yo me paro donde debo. Defiendo el trabajo de mis trabajadores, porque defender el campo es defender a la Patria.
Entrevista de Patricia Van Ploeg