“Al gobierno nacional ya nadie le cree en el interior del país. Y cómo le van a creer si incumplen todo lo que anuncian. En Firmat no se construyeron ni siquiera las viviendas del Plan Federal I”.
Carlos Torres, intendente de esa localidad, junto con otros referentes comunales, como Raúl Ponzio, de Las Rosas y Osvaldo Salomón, de Chabás, entre otros, tienen previsto reunirse esta tarde con el gobernador Hermes Binner para analizar la complicada situación que atraviesan los municipios que sufren en carne propia el conflicto agropecuario.
Antes de participar del encuentro en la Casa Gris hicieron una parada en Rosario, donde realizaron una conferencia de prensa.
El trío de intendentes coincidió —en diálogo con Crítica Santa Fe— en que “el conflicto agropecuario se está crispando cada vez más y es necesario llevar calma y generar instancias de diálogo para que las aguas se calmen”.
Ponzio consideró que desde que se inició la "guerra gaucha" el año pasado “el entretejido social y productivo de las ciudades del interior se ha ido deteriorando de tal forma, que comienzan a aparecer chispazos propios de una crisis”. Y ellos, los intendentes y presidentes comunales, son —según recalcan— “los que ponemos la cara frente a la gente”.
“Cuando uno habla de tensión social lo asocian con los saqueos. En un pueblo del interior no se va a dar eso. Nosotros hablamos de desintegración, cuando se produce el desempleo”, sostuvo Ponzio, quien reconoció además que “la bronca de la gente en el interior aumenta cuando se siente maltratada y ninguneada desde los atriles de la Quinta de Olivos”.
“Lo que la gente quiere es que la dejen en paz y le dejen de meter la mano en el bolsillo”, apuntó.
Torres consideró que “en estas crisis tan profundas no sólo son importantes las medidas de fondo sino también el cuidado de las formas, sobre todo de los gobernantes. Hay muchos sectores que necesitan las reacciones del interior y no son tan severos con las acciones que producen esas medidas.
El tema de coparticipar las retenciones es un reclamo histórico de los intendentes. Pero que se anuncie dos meses antes de las elecciones, en un marco puramente electoralista, termina provocando crispación y conflictos. Porque las medidas dejan al descubierto la intencionalidad política del gobierno”.
Los intendentes plantearon también la necesidad de que los porcentajes de la coparticipación no sean solamente aplicados a la soja sino, además, al petróleo, a la minería, a la renta financiera y a los juegos de azar.